El Parlament ha aprobado este miércoles, con los votos a favor de Junts pel Sí, a la CUP y el diputado no adscrito Germà Gordó, la reforma del reglamento para la desconexión exprés. Esta reforma, propuesta por Junts pel Sí, permitirá tramitar por lectura única y a instancias de un único grupo parlamentario una proposición de ley como, por ejemplo, la Ley del Referéndum o la Ley de Transitoriedad Jurídica.
Es precisamente por este motivo que desde que fue presentada ha estado sujeto de polémica y la oposición la ha criticado rotundamente por "vulnerar los derechos de los diputados". Durante el debate en el pleno de este miércoles la oposición ha cargado contra la reforma del Reglamento, alegando que era contraria a la Constitución y al Estatuto de Autonomía.
Ante estas críticas, el portavoz adjunto de Junts pel Sí, Roger Torrent, ha asegurado que la propuesta de su grupo es "perfectamente estatutaria, constitucional y democrática". Torrent ha justificado sus palabras apelando al dictamen del Consell de Garanties Estatutàries (CGE) que admitió que la tramitación de una proposición de ley por lectura única "no presenta en sí misma problemas jurídicos de constitucionalidad". Este mismo dictamen, sin embargo, señala también que la lectura única se tiene que limitar a casos en que la "simplicidad" de la norma lo permita.
En cualquier caso, este miércoles se ha aprobado la enmienda que Junts pel Sí presentó raíz del dictamen del CGE y que condiciona la tramitación de una proposición de ley por lectura única a "la naturaleza del proyecto" y la "simplicidad de la formulación".
La posición de la CUP
Desde la CUP, la diputada Anna Gabriel ha reconocido que su formación no hubiera planteado una reforma del reglamento en esta legislatura pero ha justificado su voto favorable alegando que la propuesta de Junts pel Sí "sirve para levantar las barreras de este pueblo para autodeterminarse".
Gabriel también ha lamentado las críticas de la oposición, que se han fijado en la reforma del reglamento como "instrumento para evitar que este país se pueda autodeterminar". "Es incoherente dar la espalda a una parte de la población que quiere votar, es de ser corto de miras", ha remachado la diputada.
Asimismo, Gabriel ha dejado de lado la lectura única, que ha eclipsado el debate, y ha repasado todas las propuestas de la CUP, entre las cuales ha destacado la limitación del sueldo de los diputados, el uso de un lenguaje no sexista o la publicidad de las sesiones parlamentarias.
Los investigados por corrupción
Otra de las propuestas de la CUP, tampoco exenta de polémica, establecía que "la mera condición de investigado en un procedimiento penal [...] por un delito de corrupción política provocará inmediatamente la suspensión de la condición de diputado por un periodo de tres meses".
Este punto hubiera tenido efectos directos sobre el diputado no adscrito Germà Gordó, investigado por la presunta financiación irregular de Convergència Democràtica de Catalunya, que se hubiera visto obligado a dejar el escaño. Sin embargo, la enmienda ha estado finalmente transaccionada con Junts pel Sí, que han condicionado la suspensión de la condición de diputado al juicio oral del investigado.