Reunió entre Pedro Sánchez i els presidents autonòmics per teleconferència. El president del Govern assenyala Madrid que, per raons òbvies i amb les xifres a la mà, està sent la comunitat més devastada pel coronavirus. I la seva presidenta, Isabel Díaz Ayuso, esclata: "Sánchez no ha dicho ni propuesto absolutamente nada que no se esté haciendo en Madrid, así que no acepto que la señale como la apestada en su mitin televisivo”. Un xou lamentable del i tu més.

reunió Pedro Sánchez Salvador Illa, Margarita Robles, José Luis Ábalos i Fernando Grande Marlaska  presidents espanyols - Moncloa

Efe

isabel diaz ayuso - efe

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Aquest dilluns, qui ha volgut recordar-li a la presidenta de la comunitat de Madrid que no tot s'hi val, ha estat l'escriptora Almudena Grandes. En poques paraules li ha dit que cal tenir un mínim de vergonya. L'escriptora més reconeguda de les lletres espanyoles ara per ara, li ha enviat un recadet en forma d'article al diari El País: " Cuando pase la emergencia habrá que dar explicaciones". Grandes està farta que la dreta només situï la manifestació feminista del 8-M com a focus de contagi. I li diu a Ayuso que faci memòria del desastre que va fer el PP amb la sanitat: "Durante años, en Madrid hubo una manifestación cada semana. Pancartas blancas, banderas blancas, batas blancas colgadas en los mismos balcones a los que salimos todas las tardes a aplaudir a las ocho en punto. No creo que nadie lo haya olvidado".

Almudena Grandes Ivan+Gimenez ICUB

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Una Grandes més rotunda que mai, acusa sense embuts: "Habrá que recordar el proyecto de privatización, parcialmente detenido por la movilización ciudadana, con el que el Gobierno de la Comunidad de Madrid pretendió desmantelar la sanidad pública. Habrá que contar el número de profesionales que perdieron su empleo. Habrá que calcular qué habría pasado si en aquella época no se hubiera concedido la gestión de hospitales públicos a ciertas empresas privadas que se han forrado gracias al deterioro de la atención sanitaria que reciben los madrileños".

Ayuso Cuatro

Cuatro

La frase final de l'escriptora, i que ha servit per a titular la peça, és la que ha indignat més els acòlits de la dreta, que li han saltat a la jugular: "No me extraña que Díaz Ayuso pida 14 millones de mascarillas y ni una menos. Dicen que la mejor defensa es un buen ataque, pero conviene calibrar las propias fuerzas mejor que las del enemigo. Cuando pase la crisis habrá que dar explicaciones, y muchas de las maniobras populistas de Ayuso acabarán estallándole en la cara, como un bumerán":