Carlos Falcó és marquès de Griñón, 82 anys, exmarit d'Isabel Preysler, pare de Tamara Falcó, aristòcrata, ric i famós. La notícia d'un tèrbol episodi de possible violència domèstica ha sacsejat la vida social madrilenya. Periodísticament, el relat que en fa el digital LOC és un intent de dissimular el que sembla: hauria agredit la seva dona, Esther Doña, en una forta discussió. Un advocat ha traduït a un llenguatge real l'eufemisme periodístic del suplement d'El Mundo. El diari de dretes blanqueja una baralla en què va haver d'intervenir la policia.
La discusión de Carlos Falcó y Esther Doña por la que pasó una noche en comisaría: "Estamos decididos a que no vuelva a ocurrir"https://t.co/VFy8iEwxZv
— La Otra Crónica (@LaOtraCronica) 11 de mayo de 2019
Relat del diari El Mundo: Matinada a una suite de l'Hotel Eurobuilding. Se senten crits i altres clients truquen a la policia. Dos agents troben un matrimoni en plena discussió: Falcó i Doña. El marquès venia de Sevilla "de una presentación de vinos". Havien discutit al restaurant de l'hotel i quan va pujar de to, "va a más", segueixen la baralla a l'habitació. "Por parte de Esther en ese momento había una situación de ansiedad y dolor". El panorama era tal que "Los agentes decidieron llevarse a Carlos Falcó a la comisaría de Chamartín y recomendaron a Esther Doña que denunciara".
La xarxa no dona crèdit a com narra el digital: "Los marqueses de Griñón tienen discusiones, como todas las parejas". El detall que ell acabés a comissaria i la policia suggerís a l'esposa que el denunciés no sembla importar els periodistes que signen la notícia. La frase essencial és "Los profesionales decidieron actuar de oficio. Interpusieron una denuncia por presunto delito de violencia de género". Un cas gravíssim que el digital matisa després de parlar amb l'acusat. Diu Falcó: "No me parece bien que la presunción de inocencia no pueda aplicarse igual siendo hombre o mujer".
La xarxa s'espanta amb la frivolitat del diari sobre un episodi que la policia veu com violència de gènere i denunciés d'ofici el marquès de Griñón:
Violencia de género, chatos. Nadie pasa una noche en comisaría por amor al arte.
— Prometeo (@pr0m3teus) 11 de mayo de 2019
Si eres rico no hay violencia de género, hay discusiones fuertes. Madre mia, está redacción de la noticia lo tiene todo. Vamos a traducir vía @anavmor https://t.co/6oCC6bzoEF
— alfredo herranz (@alfherranz) 11 de mayo de 2019
Mención especial al "Llegué a Madrid tarde procedente de Sevilla, donde había estado en una presentación de vinos. Esther estaba esperándome en el hotel y llegué a las diez de la noche" aka “Llegué tarde y calentito...”
— MissFit △⃒⃘ (@_Miss_Fit) 12 de mayo de 2019
“Los marqueses de Griñón tienen discusiones, como todas las parejas. La última terminó en comisaría”. Por una discusión no acabas en una comisaría, solo cuando hay indicios de ser autor de delito.
— alfredo herranz (@alfherranz) 11 de mayo de 2019
Y así caris, es como se transmiten prejuicios como que la violencia de género se produce especialmente en estratos sociales bajos y en inmigrantes y no se da en gente culta y formada
— alfredo herranz (@alfherranz) 11 de mayo de 2019
Que pesadilla. No discuto la presunción de inocencia. Digo que si el detenido hubiera tenido otro perfil sociológico se hablaría sin duda de violencia de género
— alfredo herranz (@alfherranz) 11 de mayo de 2019
Falcó és innocent mentre un jutge no digui el contrari. La realitat és que hi ha hagut una detenció, una acusació formal per un delicte de violència de gènere i un diari que ho despatxa escrivint "Los marqueses de Griñón tienen discusiones, como todas las parejas". Que parli la justícia.