Las judías se empezaron a cultivar en la región volcánica de Santa Pau en el s. XVIII. En la Garrotxa se cultivan exclusivamente en suelos volcánicos que, gracias a su carácter poco ácido, inciden directamente en la calidad y las características de los Fesols de Santa Pau. Es precisamente por estas características que los Fesols de Santa Pau tienen una Denominación de Origen Protegida (DOP) concreta.

Dentro de esta denominación se comercializan tan secos como cocidos y envasados. Hay tres variedades muy bien adaptadas a las condiciones, pero la más frecuente y más adaptada es la vaina brisa.

Para aquellos que no conozcan la variedad son característicos por su sabor suave y visualmente son blancos, ligeramente brillantes, redondeados y pequeños. Tienen una piel muy delgada y una baja farinositat. El grano es de medida pequeña, con un peso medio de 18 a 30 gramos por 100 semillas.

La sabiduría popular

El núcleo principal de producción es el municipio de Santa Pau pero se pueden cultivar en 6 otros municipios de la Garrotxa. Es por eso, que este municipio de Catalunya, da nombre a la Denominación de Origen Protegida.

Los productores y consumidores de la Garrotxa siempre habían defendido que las cualidades de esta legumbre se debían a la tierra volcánica en que se cultivaba. No fue pero hasta el 2007 que a raíz de un estudio de la Universidad Politécnica de Catalunya demostró que la sabiduría popular era cierta. Si se plantaban las mismas entonces en otras zonas del territorio con unas características diferentes no producían un fruto tan excepcional como los de la zona volcánica.

Pep Sau

Es por eso que la zona de la DOP se ha limitado sólo en terrenos de naturaleza volcánica.

¿Cómo sabemos cuáles son auténticos Fesols de Santa Pau?

El logotipo propio de la DOP Fesols de Santa Pau y el logotipo de la Unión Europea son los sellos que garantizan el origen y la calidad de las auténticos Fesols de Santa Pau. Los Fesols de Santa Pau no se venden nunca a granel. Este producto se comercializa siempre envasado y con la etiqueta del Consejo Regulador.

Los podéis encontrar en todos los envases de este producto, ya sea secos, cocidos o en conserva.

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