Una de cada dos peras que se producen en España procede de Lleida. Así pues, hablar de la Denominación de Origen Protegida Pera de Lleida es hablar de la pera cultivada en una de las regiones productoras más importantes de Europa.
El proyecto de la DOP Pera de Lleida reúne a 480 productores que cultivan unas 1.032 hectáreas de perales. La zona de producción tiene como eje vertebral el riego de la plana de Lleida, un territorio que se conforma por el municipio de Lleida y de otras localidades de las comarcas del Segrià, la Noguera, el Urgell, el Pla d'Urgell y las Garrigues.
Un clima idóneo
El clima de Lleida se caracteriza por|para unos inviernos muy fríos y nieblas persistentes pero al mismo tiempo por unas elevadas temperaturas en verano, una alta insolación y una baja precipitación. Gracias a las temperaturas frías en invierno los árboles pueden hacer un descanso por encarar con fuerza la primavera.
Todas estas condiciones contribuyen a la producción de una pera de elevada calidad que se diferencia de la de otras zonas productoras de Europa tanto por sus elevados niveles de azúcares, sabores y aromas como por su aspecto exterior.
La diferencia está en el sabor
La Denominación de Origen Protegida Pera de Lleida dispone del reconocimiento oficial por parte de la Comisión Europea a la calidad diferenciada de sus variedades de pera Blanquilla, pera Llimonera y pera Conference:
- Llimonera: Una variedad con personalidad. Su piel es lisa, fina y de un color verde que vira hacia amarillento al madurar, similar al aspecto de un limón. Es de sabor dulce y granulosa en el paladar.
- Blanquilla: Es la variedad más jugosa. La piel es de un color verde que evoluciona hacia verde-grisáceo cuando madura, y es lisa y fina. Su carne es blanca y carnosa, muy dulce, granulosa al centro, muy jugosa, fundente y refrescante.
- Conference: Es la variedad más crujiente. Su piel es gruesa, de color verde a verde-amarillento, y presenta manchas en función de las condiciones climatológicas. Su carne es de color blanco-amarillento, muy fina, jugosa y dulce, con un regusto ácido. Es una tipología muy valorada en pastelería.
Todas estas características están controladas por el Consejo Regulador de la DOP Pera de Lleida, que a través de las especificaciones del Reglamento y del Manual de Calidad, hace que este producto mantenga su calidad.