El proceso de divorcio entre la infanta Cristina e Iñaki Urdangarín sigue en marcha. Sin embargo, según algunas fuentes, ambas partes no tienen prisa por finalizarlo después de haber llegado a un acuerdo beneficioso para Urdangarín. Este acuerdo le habría permitido mejorar su situación económica, y se habría sellado después de que el rey emérito Juan Carlos I solucionara sus problemas monetarios tras salir de la cárcel.

El rey emérito Juan Carlos I habría prometido a Iñaki que no tendría problemas al salir de prisión. Y ante el miedo de que hablara demasiado, se habría reunido en Suiza con Cristina para proponer un acuerdo que solucionaría los problemas económicos de Urdangarín a cambio de su silencio sobre asuntos que pondrían en peligro la reputación del rey Felipe y la reina Letizia, y dificultarían el posible regreso del emérito a España.

El ‘chantaje’ de Iñaki Urdangarin por guardar silencio

A cambio de su silencio, Urdangarín se habría asegurado una asignación para no pasar más apuros económicos y habría exigido poder disponer de la casa de la familia real en Baqueira y el chalet de Bidart. En este sentido, se rumorea que Urdangarín habría rechazado una oferta de medio millón de euros por escribir un libro sobre sus memorias y revelar todos los secretos a cambio del cumplimiento de estas exigencias.

Urdangarin y Juan Carlos

En otras palabras, la tranquilidad de la familia real dependía de la tranquilidad económica de Urdangarín. Ahora que sus problemas monetarios se han resuelto y se ha garantizado su silencio, el proceso de divorcio ha pasado a un segundo plano y ya no hay prisa por cerrarlo definitivamente.

Urdangarin estaría reclamando 10 millones de euros

Pero, ¿a cuánto ascendería esa asignación?  Juan Luis Galiacho arrojó luz sobre el asunto. Según el periodista, Juan Carlos habría aceptado todas las peticiones. “El emérito ha dicho que se dejen ya de negociaciones, de regateos y que se cierre de una vez por todas el divorcio; que él asumirá lo que tenga que asumir incluido el coste añadido”, comentó Galiacho. Asimismo, asegura que la emérita Sofía también habría tenido un papel importante en este asunto al intervenir para calmar las peticiones de Urdangarín. Y que las cantidades pactadas incluirían un pago de dos millones de euros, al margen de un sueldo mensual.

Pero según el comunicador, “en estos días la situación se ha complicado, se ha emborronado más todavía y ahora Iñaki Urdangarin quiere más”. “La situación es tan complicada que entre la infanta Cristina y él ahora mismo hay hostilidad total. Él ha pedido más, tanto en la pensión mensual como en la indemnización de dos millones, que le parecen pocos. Además, los quiere en un solo pago”, añadió. Una nueva cantidad que, según Informalia, ascendería ahora a 10 millones de euros.