Charlene de Mónaco intenta recuperar la normalidad después de varios años complicados. Fue en 2021 cuando viajó a Sudáfrica para asistir a un acto de conservación de animales cuando le diagnosticaron una infección ORL que le impedía coger un avión de regreso a casa. Tuvo que realizar varias pruebas y un total de tres operaciones. Tardó más de seis meses en volver al principado. Esto provocó muchos rumores.
Por una parte se habló de la posible crisis en el matrimonio formado por los príncipes. Alberto de Mónaco y Charlene se casaron por obligación. Ella estuvo a punto de dejarle plantado en el altar, pero la interceptaron en su marcha y no le quedó más remedio que dirigirse a la iglesia. Allí empezó su supuesta ruina. Como Juan Carlos y Sofía, los príncipes nunca tuvieron relaciones íntimas. Se contó que los hijos de ambos habrían nacido mediante fecundación in vitro, por este motivo son gemelos. Incluso también han acompañado al príncipe rumores de homosexualidad.
Tras varias apariciones públicas, Charlene de Mónaco continúo apartada de sus funciones debido a su estado de salud. Canceló todos los actos institucionales de su agenda, Alberto de Mónaco siempre aparecía en solitario. La princesa ingresó en una clínica en Suiza para recuperarse de sus adicciones, supuestamente a los somníferos. La joven atravesaría una profunda depresión. "Como sé que hay rumores por ahí, dejadme decir que esto no es covid, no tiene relación con el cáncer y, si quieres hablar de más especulaciones, no tiene relación con la cirugía estética ni con un ‘trabajo’ en la cara”, reveló Alberto de Mónaco a People.
Charlene de Mónaco continúa en tratamiento para superar su adicción a los somníferos
Charlene reapareció por primera vez en abril de 2022. Escogió el campeonato de Fórmula E que alberga el Principado, en el que acompañó a su marido, el príncipe Alberto, y donde también estuvieron sus hijos, los mellizos Jacques y Gabriella. Las especulaciones sobre una posible separación han crecido en este último año, pero las han intentado desmentir con sus reapariciones conjuntas.
La ausencia de Charle se justificó como una infección del oído, pero realmente sufre una adicción a los somníferos por una profunda depresión, por ello la llaman “la princesa triste”. La revista ‘Here’ habla de una mezcla hecha con “Stilnox, Imovane y derivados de Carfentanil”, que habría tomado desde hace más de 9 años. “Ya no pudo soportar la presión y la malicia de ciertos miembros de la familia que la han hecho sufrir en silencio durante diez años”, dijo una fuente.
El príncipe Alberto le ha pedido esfuerzos para vencer esta adicción. “Si la dependencia de Charlene es totalmente tabú en la Roca, todo el mundo lo sabe. Por eso Albert aprovechó su distancia geográfica para pedirle que parara todo. Y Charlene se inclinó ante su voluntad”, se lee en la revista.