Carolina de Mónaco está muy relacionada con el mundo de la moda aunque no lo parezca. La hermana del príncipe Alberto II de Mónaco siempre ha sido alabada por su buen gusto a la hora de vestir y por haber tenido una gran belleza de joven, belleza que ha heredado su hija Carlota Casiraghi, la cual actualmente trabaja con marcas muy importantes del mundo de la moda, pero Carolina de Mónaco está relacionada con alguien más que también está triunfando en este mundo: su ahijada, Nine d’Urso.

Nine D'Urso
Nine D'Urso

La ahijada de Carolina de Mónaco lleva de forma natural la elegancia por sus venas, algo que le ha jugado muy a favor en cuanto a su forma de ser, lo cual es algo que suelen buscar mucho las empresas de moda. Sin ir tan lejos, Nine d’Urso trabaja con Balenciaga, firma que está muy contenta de tener a la modelo como una de las caras principales de su marca, y esto se ha notado en lo mucho que ambos han trabajado codo a codo, incluso en ocasiones donde Nine d’Urso ha llevado ciertos estilos sin el miedo al qué dirán. Es toda una profesional en lo que hace, pero es que no es solo capaz, sino que también es atractiva. Ha sido alabada por muchos expertos en el mundo de la moda, indicando que nació para lo que se dedica, y quizá así sea.

La vida de Nine d’Urso como moza es gracias a Carolina de Mónaco

Nine d’Urso es hija de Inés de la Fressange, quién fue muy íntima amiga de Carolina de Mónaco, y fue por esto que la primera decidió que su tan querida amiga fuera la madrina de su hija. Es así como la hermana del príncipe Alberto II de Mónaco comenzó su recorrido como madrina, aunque lo cierto es que hubo cierto punto en el que comenzó a ser mucho más cercana a su ahijada.

Nine d’Urso corrió con la desgracia de perder a su padre, Luigi d’Urso, cuando aún era muy pequeña, y esto obviamente fue algo muy doloroso para la joven hija de Inés de la Fressange, pero Carolina de Mónaco siempre estuvo ahí para su ahijada. La princesa le dio toda la atención posible a la hija de su amiga y no la obviaba para nada, por lo que Nine d’Urso tuvo una gran influencia de parte de Carolina de Mónaco, y muchos señalan con el dedo a esta como la causante de que la hija de Luigi d’Urso se haya inclinado tanto por el mundo de la moda. La princesa era muy glamurosa y le enseñó todo lo posible de moda a su ahijada, cosa que esta utilizaría tiempo después para su vida profesional. Nine d’Urso es casi descendiente de una princesa y por eso las marcas se han fijado tanto en ella, aunque también en parte ha sido por su belleza, otra de las cosas que la ahijada de Carolina de Mónaco lleva por la sangre.