La relación entre Alberto de Mónaco y Charlene siempre ha estado en duda. Le han acompañado numerosos rumores de crisis en su matrimonio. Y es que cuenta la leyenda que la princesa nunca fue feliz, por ello no es capaz de esbozar una sonrisa. Se convirtió en hielo. En el último momento quiso dejarle plantado en el altar, pero la interceptaron y la obligaron a casarse. Con pocas fuerzas dijo “sí, quiero”. En más de una ocasión, Charlene habría intentado divorciarse, pero el príncipe la amenazó con dejar de ver a su hijos, quienes se quedarían en el principado. Son muchos los que comparten que este matrimonio tan solo es una tapadera para no descubrir la gran verdad. Charlene tendría intereses económicos y Alberto no querría que se descubrirse su verdadera orientación sexual.
Según los medios internacionales, la relación de Charlene y Alberto es una falsa. La princesa de mantendría en su cargo por petición del príncipe. Le pagaría 12 millones de euros anuales y le daría total libertad. Los rumores de la supuesta homosexualidad de Alberto se hicieron más fuerte cuando se descubrió que los mellizos del matrimonio nacieron mediante fecundación in vitro. Se dice que no mantuvieron relaciones íntimas en ningún momento.
La verdad sobre la orientación sexual de Alberto de Mónaco
No estaría bien visto que un príncipe fuese homosexual, sería una deshonra para la corona del principado. Por ello ocultaría sus gustos con un falso matrimonio.Los rumores surgieron en 2003, cuando el príncipe acudió con unos amigos en su jet privado a un viaje secreto a Suecia. Los que fueron testigos aseguraron que disfrutó como uno más del Festival Gay Escandinavo. Se fotografió con dos drag queens a las que abrazaba. Él dijo que ellas le pidieron la fotografía y que no sabía que se celebraba un festival gay.
Tan solo un año más tarde estas fotografías de las que habló todo el mundo, aparecieron algunos testimonios como una ex Playmate con nombre artístico Victoria Zdrok afirmó en una entrevista al periodista Chaunce Hayden que una vez hizo un trío con el príncipe Alberto y un amigo suyo y que él parecía más interesado en el amigo que en ella.