Estefanía de Mónaco y sus dos hijos mayores, Louis y Pauline Ducruet ocupan las últimas posiciones de la línea de sucesión al trono monegasco. Sin embargo, debido a las leyes del Principado, el príncipe Alberto ha tenido que ‘desterrar’ a la hija menor de su hermana Estefanía, debido a que su nacimiento estuvo totalmente marcado por el escándalo y la ilegitimidad. Según la constitución de Mónaco, solo los descendientes del monarca reinante, así como sus hermanos y sus hijos, que se hayan casado con el consentimiento del príncipe reinante y que sean ciudadanos monegascos, podrán optar por sus derechos dinásticos. Por este motivo, las personas que hayan nacido a raíz de relaciones extramatrimoniales o adulterio quedarán excluidos de la línea de sucesión. Y precisamente esto fue lo que ocurrió con Camille Gottlieb, la hija de Estefanía de Mónaco con Jean-Raymond Gottlieb, su antiguo guardaespaldas.
La relación de Estefanía de Mónaco con Jean-Raymond Gottlieb, entonces jefe de seguridad del Palacio Grimaldi, se convirtió en un verdadero escándalo en 1998, dado que salió a la luz dos años después de que la prensa filtró unas fotos muy comprometedoras de Daniel Ducruet, esposo y padre de los dos hijos mayores de Estefanía, con Fili Houteman, una bailarina exótica belga. A pesar de que Ducruet argumentó que todo había sido una trampa, Estefanía decidió divorciarse de aquel hombre que también fue su guardaespaldas y meses más tarde comenzó una relación secreta con Gottlieb. Este romance duró muy poco tiempo y no llegaron ni siquiera a comprometerse. De hecho, la hermana menor de Alberto de Mónaco se negó a poner el nombre del padre de su hija en el certificado de nacimiento de Camille, dado que quería mantener su identidad en secreto. Al no tener apellido paterno y haber nacido fuera del matrimonio, Camille quedó prácticamente desterrada del Principado desde su nacimiento, dado que no formaba parte de la línea sucesoria al trono, a diferencia de sus dos hermanos.
Durante muchos años, la identidad del padre de la hija menor de Estefanía de Mónaco fue un misterio, a pesar de que el guardaespaldas sí estuvo en su bautizo y formó parte de su vida, pero en secreto. Sin embargo, cuando la joven cumplió 19 años tomó la decisión de usar el apellido de su padre, acabando así con el misterio sobre la identidad de su progenitor.
Los Grimaldi sin derechos dinásticos
Camille Gottlieb no es la única Grimaldi que no tiene derechos dinásticos en Mónaco. El hijo mayor Carlota Casiraghi, Raphäel ElMaleh, fruto de su relación con el cómico Gad ElMaleh, también ha sido excluido de la línea sucesoria al haber nacido fuera de matrimonio, así que su lugar lo ocupa su hermano menor, Balthazar Rassam (n. 2018), fruto del matrimonio entre Carlota Casiraghi y el productor de cine Dimitri Rassam.
Asimismo, los dos hijos mayores del príncipe Alberto, Jazmin Grace y Alexandre Grimaldi, no tienen el derecho a sucederle, dado que nacieron fuera del matrimonio y por muchos años fueron hijos ilegítimos.