El rey Felipe VI está sufriendo en carne propia lo que su madre, la reina emérita Sofía, ya sufrió durante años. Es decir, los engaños reiterados de su pareja sentimental. Sofía tuvo que lidiar con las numerosas amantes de Juan Carlos I. Y aunque los engaños de Letizia no llegan a la cifra que ostenta su suegro, han sido más escandalosas, teniendo en cuenta que Letizia siempre ha querido aparentar esa imagen de perfección e inocencia absoluta.

Las revelaciones de Jaime del Burgo sobre sus presuntas relaciones con Letizia de forma reiterada en el tiempo, algunas de las cuales se produjeron cuando ya estaba con Felipe, han causado estragos. Y también las de Jaime Peñafiel en su último libro, ‘Letizia y yo’, y en varias entrevistas. Sobre todo en la ofrecida al canal de YouTube ‘La reunión secreta’, que ha sido un bombazo informativo.

Letizia, vida promiscua en México

Con todo, han salido a la luz detalles sobre la vida de Letizia que están haciendo temblar los cimientos de la Zarzuela. Que si le propuso a Jaime mudarse a Nueva York, que si tuvo que recurrir a los óvulos de Erika Ortiz, su hermana, para tener a Leonor y Sofía, que si quería tener un hijo por vientre de alquiler con Jaime al no poder quedarse embarazada… Según Peñafiel, “la pareja ya no existe”.

Felipe y Letizia mirada

Jaime Peñafiel, en la entrevista mencionada, también se refiere otras aventuras sentimentales que ha tenido Letizia a lo largo de su vida antes de conocer a Felipe, que tuvieron lugar en Estados Unidos y en México. Relaciones, algunas de ellas, que habría mantenido mientras estuvo con Alonso Guerrero, con quien tuvo un noviazgo de 9 años y un matrimonio de año y tres meses.

Las infidelidades acaban con el matrimonio de Letizia y Alonso Guerrero

Cuando estuvo en México, a Letizia se le atribuyen varias relaciones. Entre ellas, destacan las que tuvo con un director de un diario casado y con cinco hijos, y también el que tuvo con el líder de Maná, Fher Olvera. Una vida promiscua que mantuvo cuando volvió a España e inició su relación con Alonso, con quien ya surgió la chispa cuando ella era su alumna en el instituto.

Alonso Guerrero y Letizia

Fuentes nos afirman que uno de los motivos de que se casaran después de varios años de noviazgo tenía que ver con tener atada en corto a Letizia, que iba y venía cuándo y cómo quería, pero que la estrategia no dio resultado. De ahí el divorcio poco más de un año después.