Juan Carlos sigue haciendo números para ser el español con más jeta de los últimos años. El campechano tendría que ir pensando otro sobrenombre más adecuado a su mano larga y a su comportamiento vergonzoso. La penúltima: El Español explica que el rey emérito no declaró a hacienda los fondos de la Fundación Lucum. El medio hace esta afirmación después de haber tenido acceso a la declaración del gestor a Arturo Fasana, confirmando que no declaró el dinero de las cuentas suizas, y que mandó crear una 'estructura' al país helvético para guardar, lejos de la Hacienda española, una 'importante donación' que iba a recibir procedente de Arabia Saudí.

El padre de Felipe sigue demostrando que en este país los Borbones nos toman el pelo. Para que después los vecinos de las diferentes ciudades que visitan a los monarcas salgan a las calles extasiados a gritar ¡Viva el Rey! como si hubieran visto una aparición mariana... Patético. Afortunadamente. Juan Carlos ya no puede borrar el rastro abyecto que está dejando tras de sí. No es la única información sobre él. También explican como alguien muy próximo al emérito, su primo Álvaro de Orleans-Borbón, hace públicos detalles curiosos de la relación sentimental (o lo que fuera aquello) entre Juan Carlos y Corinna Larsen.

GTRES

Íntimo del rey, además de familiar, conoce todos los secretos y detalles de aquel affaire. En el nuevo episodio del podcast XRey, realizado por el periodista Álvaro de Cózar, quien fue considerado testaferro de los negocios de JC revela que advirtió a su primo:  "Más de una vez le dije 'mira lo que estás haciendo'. Yo no sabía qué hacer, pero veía lo que estaba ocurriendo". Según el empresario de 73 años, la relación le daba mala espina: "Estaba al corriente de las amistades del Rey, en este caso con Corinna, y tenía mis ideas sobre todo esto, y no eran las más constructivas. Lo que hace el rey… me callo. Lo que hace mi primo, pensando que yo soy admirador de la reina también, pues esto no era una cosa fácil para mí. Había comprendido que se había involucrado en una pasión muy fuerte. No sé cómo encontrar las palabras correctas, pero esta pasión se había salido de lo normal".

 

De Orleans-Borbón habla con términos muy gruesos sobre Juan Carlos y Corinna: "Cada uno tiene su vida y hace sus cosas, pero esto estaba teniendo algo de tóxico. Corinna, una empresaria capaz en el campo de la mediación internacional, y un rey, con todas esas características, muy humanas, es una combinación que me daba escalofríos, porque me estaba dando cuenta, quizás antes que muchos otros, que esto podía terminar muy mal. Lo conversé con otras personas, y todas me decían lo mismo, es que no se le puede hablar". Y pasó lo que temía, además de pagar vuelos por valor de 3 millones de euros: "Me salió el tiro por la culata, pero no importa, es un dinero bien gastado considerando las nefastas circunstancias. Pero el vuelo es una consecuencia, el objeto lamentable es la relación que causó los vuelos, eso es lo que me duele. La situación de la Reina me ha causado un dolor muy fuerte. Yo la conocía desde jóvenes".