Casa Real preparó a conciencia la celebración de la mayoría de edad de Leonor, con grandes actos oficiales de gala en el Congreso de diputados, Palacio y en familia. En cambio han mostrado una absoluta desidia con los 18 años de la infanta Sofía, que se celebran sin pena ni gloria el 29 de abril. Sofía sola en Gales. Fin de la celebración. La hija pequeña de los reyes está llamada a ser la reina de España si Leonor renuncia, enferma o tiene un accidente. Sofía tiene un papel constitucional más que relevante, pero en Zarzuela la ven cómo siempre han visto a las infantas Cristina y Elena: decorativas e irrelevantes. Estaban tan centrados en formar a Leonor y hacerla una princesa perfecta, militarizada, sobria y sin espontaneidad que han olvidado que Sofía es igualmente hija de los reyes. Y la chica ha dicho basta. Contraviniendo las instrucciones de su padre se ha negado a recibir formación militar, probablemente por los consejos de Letizia, que puso una línea roja para impedir que la pequeña pase por el mismo aro que la mayor. Pero eso ha fastidiado a Felipe y ha alejado a Sofía de la Corona. El digital más afín a Casa Real y a las Fuerzas Armadas, Monarquía confidencial, confirma las sospechas: Felipe está muy disgustado con Sofía.
Las fuentes de Zarzuela no esconden el problema familiar con la hija pequeña: "La decisión de la infanta Sofía de no recibir formación militar ha provocado un cierto ‘desencuentro’ familiar. Según fuentes cercanas a Zarzuela, su padre, el rey Felipe VI, no está conforme con la opción tomada por su hija menor, porque considerar que la formación castrense, no solo fortalece el carácter y afianza relaciones, sino que simboliza un compromiso institucional con España". Felipe ve a Sofía poco comprometida con su obligación de representar a la Corona. Letizia le convenció que solo Leonor fuera obligada a perder tres años en el Ejército pero que con Sofía se permitiría que ella decidiera. Y la decisión ha sido contraria a los intereses de Felipe que quería una Sofía militar y evitar, de paso, que la pequeña ingrese en la Universidad un año antes que Leonor, como sucederá en septiembre. El miedo añadido es que Sofía acabe siendo la favorita y eclipse a Leonor.
Sofía es decididamente antimilitar, un rasgo de rebeldía con un padre jefe de las Fuerzas Armadas. Según el digital la hermana de Leonor rechazó disfrazarse de militar por Carnaval en Gales y se ha negado a ingresar en el Ejército. Esta demostración de personalidad podría hacer caer Sofía más simpática que Leonor: "Sofía suele mostrarse en público más relajada y espontánea que su hermana Leonor. Se trata de un rasgo que llama la atención, ya que esa naturalidad podría ser una cualidad relevante en su futuro. Pero también podría generar comparaciones con su hermana mayor, que mantiene una actitud más formal y solemne. Aunque los reyes tratan de igual manera a sus dos hijas, son muy conscientes de que, a nivel institucional, existen ciertas diferencias entre las dos, y de que Sofía no debería ‘eclipsar’ a su hermana". Sofía pone en peligro la popularidad de Leonor. Felipe siempre fue el hijo favorito de los reyes para la opinión pública, porque sus hermanas Cristina y Elena eran dos panes sin sal. Sofía ha dicho que para hacer de jarrón chino no cuenten con ella. La mano que mueve la cuna es Letizia.