Hace unos meses que la casa real británica solo recibe malas noticias, que si el cáncer del rey Carlos III, que si el cáncer de Kate Middleton, que si los rumores de supuestos cuernos del príncipe Guillermo a su mujer, que si el príncipe Enrique ha estado en Londres y no ha ido a ver a la familia, que si tienen una mujer en palacio para sustituir a la princesa de Gales en algún acto... Ahora, sin embargo, parece que las aguas se han calmado, y eso que el monarca ha hecho público un retrato que le han hecho que da de todo menos paz, todo lo contrario, un dibujo de un rojo sangre que echa para atrás, más propio de una película de terror o, como dijo Laura Fa en el Planta Baixa de TV3, de un anuncio de aquellos de ¡Hola! Soy tu menstruación.

Mucho menos diabólico que la pintura, y mucho más angelicales son los nietos del rey Carlos. Los tres hijos de Guillermo y Kate Middleton, que hacen las delicias de la familia y que en los momentos complicados, y ahora hace tiempo que están viviendo unos cuantos, son el salvavidas al cual acogerse. Los tres pequeños, George, Charlotte y Louis, de 10, 9 y 6 años respectivamente. Unos niños de quien hemos sabido cómo los llaman en casa, qué apodos cariñosos les dedican sus orgullosos padres. Tanto a Guillermo, como a Kate como al resto de adultos de la familia real británica, los medios y los ciudadanos ingleses los han bautizado a menudo de muchas maneras, un país donde hay bastante tendencia a poner nombres originales al personal. Motes sangrantes en algunos casos, todo lo contrario que como llaman los príncipes de Gales a sus tres hijos.

Como dicen en Lecturas, "Algunos de estos motes solo se utilizan entre ellos y sus amigos más cercanos y queridos, otros son increíblemente especiales y otros son más inusuales". Es el caso de los pequeños. Y es que la prensa del Reino Unido acaba de publicar cómo se dirige la pareja a sus hijos, por ejemplo, a la niña, a Charlotte, que ya tiene una abreviatura. Y es que se refieren a ella como 'Lottie', al igual que la nombran los compañeros de escuela, añadiendo en este caso un socarrón y cariñoso 'of Wales'. Pero Charlotte tiene muchos más apodos como la llaman en casa. Kate y Guillermo también se refieren a ella como 'princesa guerrera', como la televisiva Xena. Y todavía hay un tercer nombre. Fuentes próximas a la casa real británica han explicado a Vanity Fair que el padre, Guillermo, utiliza el nombre de 'Mignonette', palabra en francés, cariñosa, que vendría a ser 'pequeña, bonita, dulce o delicada'.

¿Y qué pasa con George y Louis? El hijo mayor tiene un mote curioso, inspirado en una marca inglesa de bolsitas de té. Los amigos le acortaron el nombre a dos iniciales, 'PG' (de Prince George), las mismas que la marca de bebida inglesa por excelencia. Un nombre que, como se puede ver en los envoltorios, viene continuado de 'Tips'. Y efectivamente, entonces, los padres de la criatura, después de oír como le llamaban los amigos a su hijo, ellos pasaron a llamarlo 'Tips'. Como el té.

 

Queda el pequeño, el príncipe Louis. Explica Lecturas que mientras la familia estaba trabajando en un voluntariado con un grupo Scout como parte del 'Big Help Out', una iniciativa a nivel nacional en honor a la coronación del rey Carlos, hicieron un descanso para asar malvaviscos en una hoguera, una escena tierna en la que se oyó decir a la madre, Kate, la frase: "Pon eso al fuego, Lou Bug" (que traducido vendría a ser 'bichito Lou'). Ahora la curiosidad estaría en saber cómo se llaman entre ellos Kate y Guillermo.