El primer año de reinado de Carlos III en el Reino Unido ha estado marcado por diversas decisiones y desafíos, pero uno de los temas que más controversia ha generado es el de los títulos de los hijos del príncipe Harry y Meghan Markle, Archie y Lilibet. Según el protocolo real, Archie y Lilibet tienen derecho a los títulos de príncipe y princesa por ser nietos del actual monarca. Sin embargo, a los tres meses de comenzar su reinado en diciembre de 2022, el rey Carlos III aún no había decidido si concederles estos títulos. Finalmente, parece que la decisión se ha tomado, ya que los niños ahora figuran como "príncipe" y "princesa" en la web oficial de la familia real.
Sin embargo, el nuevo monarca ha dejado claro que quiere tener una relación cercana con sus nietos, y para lograrlo, ha hecho una solicitud que ha generado nuevas tensiones entre él y los Sussex. Según fuentes cercanas a la Familia Real, el rey Carlos III ha exigido que los niños se muden a Inglaterra para poder estar más cerca de él y del círculo de la realeza. Sin embargo, esta condición ha sido rechazada categóricamente por Meghan Markle, quien ha expresado su deseo de que sus hijos crezcan en Estados Unidos, lejos de la presión de la vida pública en el Palacio.
La generosa oferta de Carlos III
La situación actual es un juego de poder entre Carlos III y Meghan Markle. El rey británico está dispuesto a retirar los títulos de príncipe y princesa a Archie y Lilibet si no se mudan al Reino Unido y asumen sus responsabilidades como miembros de la Familia Real en el futuro. No obstante, en un intento de resolver este dilema, Carlos III ha hecho una generosa oferta a su hijo menor, el príncipe Harry, para que acepte sus condiciones. Y es que, además de conservar los títulos de sus hijos, Harry recuperaría sus derechos dinásticos y sus millonarias propiedades. La decisión de Carlos III se basa en su deseo de mantener a los pequeños Archie y Lilibet alejados de los reflectores de Hollywood. Para lograrlo, ha propuesto a Harry que se mude con sus hijos a uno de los apartamentos privados del Castillo de Windsor. Allí, los niños podrán crecer en un ambiente más privado y alejado del escrutinio público.
Educación de élite en Windsor
Asimismo, Carlos III ha garantizado la financiación total de la educación de Archie y Lilibet en las instituciones académicas más destacadas del Reino Unido. Una de las alternativas contempladas es Lambrook School, que se encuentra en las cercanías de la residencia familiar en Windsor. Este prestigioso colegio privado es el mismo en el que cursan sus estudios los tres hijos del príncipe Guillermo y Kate Middleton: George, Charlotte y Louis. Esta institución es reconocida por su enfoque educativo que combina tanto métodos modernos como tradicionales, y se distingue por ofrecer a los estudiantes la posibilidad de participar en actividades deportivas de élite, como el polo, la natación y el submarinismo, actividades que la Familia Real siempre ha apreciado y valorado.