En el trasfondo de la realeza danesa, la historia de amor entre el recién proclamado rey Federico X de Dinamarca y la modelo Bettina Ödum estuvo marcada por controversias y desafíos, eclipsando momentáneamente la figura de Mary Donaldson. En el año 2000, El País titulaba "Novia, pero difícilmente reina" al referirse al conflictivo noviazgo del príncipe heredero danés con Bettina, una plebeya que, a pesar de ser tan anónima como Mary, fue rápidamente descartada como posible monarca por la propia reina Margarita.
Bettina Ödum: un noviazgo que sacudió la corona danesa
La relación de Federico y Bettina tomó un giro tumultuoso durante unas vacaciones en Saint Tropez en 1998, cuando un paparazzi captó a la supuesta futura reina sin la parte de arriba del sujetador. El escándalo resultante no solo llevó a un comunicado de la casa real danesa, sino que también generó una reacción del pueblo danés que instó a la revista ‘Se og Hør’ a no repetir la misma historia cuando Federico se involucró posteriormente con Mary Donaldson.
A pesar de los escándalos, Bettina Ödum dejó una marca indeleble en la vida de Federico, inicialmente como una candidata a reina y luego como una figura persistente en su vida. Y es que, a pesar de las recomendaciones reales de buscar una pareja no danesa, Federico persistió en su relación con Bettina durante dos años. La joven danesa, menos reluciente en comparación con sus otras conquistas, compartía la pasión del príncipe por proyectos audaces, como su participación en una expedición al Ártico en trineo tirado por perros.
Sin embargo, el destino de Bettina experimentó un giro irreversible en septiembre de 2000, cuando los caminos del entonces príncipe y Mary Donaldson se cruzaron en Australia, durante la visita del primogénito de la reina Margarita a los Juegos Olímpicos de Sídney. Mientras Bettina intentaba evadir a los paparazzi en Dinamarca, Federico entablaba una relación con Mary, quien eventualmente se convertiría en su esposa.
Bettina Ödum: más que una novia, menos que una reina
La relación entre Federico, Bettina y Mary se volvió un triángulo amoroso complejo y envuelto en secretos. Mientras Federico afirmaba que su encuentro con Mary fue amor a primera vista, los hechos apuntan a que compartió momentos significativos con Bettina incluso después de comprometerse con la australiana, marcando así la primera infidelidad en la relación de Federico y Mary. La modelo danesa, consciente de que la situación no cambiaría para ella, decidió poner fin a la relación en marzo de 2001, según ha revelado ‘Billed Bladet’.
Aunque Bettina afirmó no ser infeliz por la ruptura y, de hecho, se casó antes que Federico y Mary, dejó caer una pequeña venganza al revelar a la prensa el nombre y paradero de la "misteriosa chica australiana". Por otro lado, circulan rumores que sugieren que las lágrimas derramadas por Federico en el día de su boda con Mary Donaldson eran un tributo al recuerdo de la novia danesa que pudo haber sido reina y no fue, con la que no pudo romper del todo y con la que le fue infiel a Mary Donaldson: Bettina Ödum.