La visita del presidente de Argentina, Mauricio Macri, y su mujer Juliana Awada en Madrid para visitar a los reyes Felipe VI y Letizia sigue dando que hablar.
Después de los regalos del presidente a los monarcas y del "duelo" de estilismos entre Letizia y Awada, esta vez la noticia sucedió durante la cena de gala en el Palacio Real.
Al acabar su discurso, Macri quiso brindar con una copa de agua. Inmediatamente, Letizia, que estaba situada a su izquierda, lo interrumpió para corregirlo y entregarle una de champán (o sería cava catalán?).
A pesar de la anécdota, Macri se deshizo en elogios hacia los reyes por su buena acogida. Y es que los monarcas, a causa de la incertidumbre política vivida recientemente donde no había gobierno, no acogía un acontecimiento de estas características desde julio de 2015, cuando recibieron al presidente peruano Ollanta Humala y su mujer, Nadine Heredia.
El otro rasgo destacado de la cena ha sido el uso de la Tiara de Lis por parte de la reina, la que es considerada como la diadema más importante de la familia real española.
Este hecho dota de más importancia la visita de Macri y su mujer, ya que es la primera vez que se la ha podido ver con esta joya.