Finalmente, seis meses después de la muerte de Isabel II, la página web oficial del Palacio de Buckingham se actualizó para confirmar el nuevo tratamiento real de los dos hijos del príncipe Harry y Meghan Markle como príncipes de Sussex. Sin embargo, el Palacio decidió seguir castigando a Meghan y a Harry al no hacer este nombramiento de manera oficial, así que la pareja ha considerado esta acción como un nuevo desplante a pocos días de la ceremonia de coronación de Carlos III.
De acuerdo con una patente real concedida en 1917 por el rey Jorge V, abuelo de Isabel II, “los hijos de cualquier soberano y los hijos de los hijos del soberano tendrán en todo momento y disfrutarán del título de Alteza Real, con el título de Príncipe o Princesa antes de sus respectivos nombres de pila o sus títulos honoríficos”. Sin embargo, Carlos III no quiso nombrar oficialmente a Archie y Lilibet con el título de príncipes a través de un comunicado. Algo que sí hizo con sus otros tres nietos, George, Charlotte y Louis, hijos del príncipe Guillermo y Kate Middleton.
Según una fuente cercana a los Sussex, “los títulos de los niños han sido un derecho de nacimiento desde que su abuelo se convirtió en monarca. Este asunto se ha resuelto durante algún tiempo en consonancia con el Palacio de Buckingham”, pero no fue hasta el bautizó de Lilibet Diana que se dio a conocer estos títulos extraoficialmente, dado que en la línea de sucesión al trono seguían apareciendo como ‘Master Archie Mountbatten-Windsor’ y ‘Miss Lilibet Mountbatten-Windsor’.
Ahora, la experta en Casa Real Ingrid Seward indicó a través del tabloide ‘The Mirror’ que Meghan y Harry están realmente indignados con la Familia Real británica, ya que desde el Palacio de Buckingham no se hizo ningún tipo de anuncio oficial sobre los títulos de sus hijos. “A Archie y Lilibet se les permitió usar este título desde que murió su bisabuela, pero sus padres decidieron no hacerlo hasta ahora. Qué interesante, esperaron seis meses para hacer esto. Esperaban que el palacio de Buckingham se adelantara y lo anunciara antes que ellos. No hubo suerte", dijo la autora. Además, según el ‘Daily Mail’, los duques de Sussex estaban realmente molestos porque Carlos III no reconoció de forma inmediata los títulos de sus hijos. No obstante, un portavoz del Palacio reveló que el cambio no se había hecho debido a que esperaban que Meghan y Harry tomaran la decisión final sobre el tratamiento de sus hijos.
Nuevo baile de títulos en el Palacio de Buckingham
Hace unos días, el Palacio de Buckingham anunció que Carlos III le había conferido el ducado de Edimburgo, título que ostentó su padre hasta su fallecimiento, a su hermano Eduardo. A partir de ahora, será conocido como Eduardo de Edimburgo, mientras que su esposa será Sofía de Edimburgo, su hijo Jacobo será conocido como conde de Wessex y su hija mantendrá su título de Lady Luisa Mountbatten-Windsor. Esto ha provocado el enfado de Meghan y Harry, quienes esperaban que el Palacio anunciara en un comunicado el nuevo tratamiento real de Archie y Lilibet como príncipes de Sussex.