Juan Carlos ya ha dormido en Madrid esperando poder hacerse este domingo la foto con la Familia Real al completo y simular que ya es uno más de la Zarzuela. El emérito intentando ocultar que su exilio en el desierto es a causa de haberse corrompido hasta los huesos cobrando comisiones por hacer de jefe de Estado y en negro en paraísos fiscales para evitar pagar a Hacienda. La muerte de su segundo sobrino, Juan Gómez-Acebo, hijo de la difunta infanta Pilar, es una nueva oportunidad para aparecer de la mano de Felipe, Cristina y Elena, con Sofía cerca pero no mucho y quizás Letizia con cara de póquer, resignada a blanquear su imagen y la del suegro recíprocamente. De momento la realidad es que Felipe no ha levantado el veto a que su padre pernocte en un Palacio del Estado y Juan Carlos duerme en el Four Seasons, un hotel de lujo:

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Juan Carlos de funeral, GTRES

Como la película "Four weddings and a funeral", el emérito ya solo visita España como invitado a bodas y entierros, un papel triste para el que fue jefe del Estado. Le pasa lo mismo entre las otras monarquías europeas, que le han visto el plumero y solo lo invitan, obligados, cuando hay algún sepelio. Por la muerte de Elisabeth II fue invitado por el rey Carlos pero ahora, un par de años después, han hecho un movimiento muy explícito en las redes sociales: han eliminado a Juan Carlos de las fotos principales. Se ha dado cuenta de ello la siempre atenta Pilar Eyre: "23 Reyes y 17 Reinas se unieron a las jefes del Estado y representantes de 121 países para una recepción organizada por la familia real británica del palacio de Buckingham, la víspera del funeral de la reina Elisabet II".

A Juan Carlos empieza a pasarle como Letizia: ya no sale a las fotos. Es el primer paso para darlo por amortizado. Letizia no protagoniza ninguna portada de la prensa rosa, o cuando lo hace es para decir que lo han echado. I Juan Carlos todavía tenía cierto protagonismo pero decreciente. El domingo querrá recuperar los focos y acercarse indisimuladamente a su hijo durante el funeral de Juan, el sobrino que tanto le da, que murió en agosto y el jubilado octogenario Juan Carlos no puso un pie la Madrid para dar el pésame a su familia. Juan Gómez Acebo es la excusa para pasarse un fin de semana en un hotel de lujo de Madrid, recibir visitas y hacerse la foto con los Borbones como diciendo 'Ya estoy aquí'. Y excepto los monárquicos más casposos, Juan Carlos ya solo volverá de verdad un día: dentro de una caja.