La noticia del diagnóstico de cáncer de Kate Middleton ha sacudido los cimientos de la Familia Real británica, desatando una ola de preocupación y preparativos para enfrentar cualquier escenario futuro. Mientras la princesa de Gales lucha contra la enfermedad, los ojos del mundo se centran en los próximos movimientos de la Corona. Según los reportes del periódico "Sunday Mirror", se rumorea que el rey Carlos III de Inglaterra está redactando un comunicado que saldrá a la luz en breve, posiblemente coincidiendo con la ausencia de su esposa, la reina Camilla, quien estará presidiendo un servicio en la Catedral de Worcester al cual él no asistirá.
A pesar de esto, el monarca desea estar presente de alguna manera. En medio de su propia batalla contra el cáncer y la lucha de su nuera contra la misma enfermedad, se dice que planea grabar un video para apaciguar las aguas. De acuerdo con fuentes del mencionado medio, su objetivo es transmitir un mensaje de esperanza para tranquilizar al público y mantener la imagen de estabilidad de la monarquía británica. Consciente de la importancia de mantener una frente unida en tiempos difíciles, Carlos III busca transmitir un mensaje de esperanza y unidad familiar en medio de la crisis que atraviesa su nuera.
Preocupaciones en el Palacio
Ahora bien, a pesar de los buenos deseos expresados por todos los miembros de la Familia Real, la preocupación es palpable en 'La Firma'. El diagnóstico de cáncer de Kate Middleton tomó a todos por sorpresa, lo que llevó a todos en el Palacio de Buckingham a iniciar la elaboración de protocolos para cualquier escenario posible, incluida la eventualidad de que Guillermo ascienda al trono en caso del fallecimiento de Carlos III, ya sea con o sin la presencia de Kate Middleton.
La realidad es clara y despiadada: la enfermedad del monarca ha progresado más allá de cualquier posibilidad de retorno. Esta sombría situación es comprendida por todos los miembros de la Familia Real, así como por su círculo más íntimo de allegados y líderes políticos del Reino Unido. Con el deterioro continuo de la salud de Carlos III, se baraja la posibilidad de que Guillermo asuma el papel de príncipe regente en caso de que el rey sea incapaz de cumplir con sus deberes oficiales, una medida contemplada en la legislación británica para asegurar la continuidad de la monarquía en tiempos de crisis.
Los últimos deseos del monarca
Asimismo, según fuentes cercanas al monarca, Carlos III ha dejado claro a su primogénito que debe estar preparado para gobernar, con o sin Kate Middleton a su lado. Ante la posibilidad de que tanto él como la princesa pierdan la batalla contra el cáncer, el destino de la monarquía recae en los hombros de Guillermo. El príncipe no puede dar marcha atrás, ya que la abdicación podría abrir paso a que el trono sea heredado por el príncipe Harry, algo que Carlos considera una catástrofe para la imagen pública de la monarquía. Los últimos deseos del monarca son claros: Guillermo debe ser rey con o sin reina. Carlos III ha concienciado a su hijo sobre la importancia de cumplir con sus responsabilidades como soberano, asegurando así la continuidad de la monarquía británica en tiempos de incertidumbre.