El tiempo se agota para el rey Carlos III. Los médicos han sido claros: su enfermedad avanza rápido y es poco probable que tenga más de un año de vida. Consciente de la fragilidad de su situación, el monarca ha tomado una decisión que muchos consideran inesperada: quiere ver a su hijo Harry.
Desde que asumió el trono británico, Carlos ha intentado mantener la compostura propia de un rey, pero la realidad lo ha golpeado con fuerza. Su salud se ha deteriorado rápidamente, y aunque el Palacio de Buckingham ha intentado minimizar la situación, fuentes cercanas han revelado que el monarca lucha contra un cáncer agresivo. Sabe que el tiempo es un bien escaso y que no puede permitirse dejar asuntos pendientes. Y entre esos asuntos, el más doloroso es el distanciamiento con su hijo menor.

Carlos III quiere limar asperezas con su hijo Harry antes de que sea demasiado tarde
Para Carlos III, este no es solo un asunto personal. La monarquía británica atraviesa uno de sus momentos más frágiles, y una imagen de unidad familiar podría fortalecer la institución. Pero más allá de los intereses políticos, hay algo más simple y humano: el deseo de un padre de ver a su hijo antes de que sea demasiado tarde.
Con la muerte acechando y el final inevitable acercándose cada vez más rápido, Carlos ha decidido que es momento de dejar el orgullo a un lado. No quiere partir sin haber intentado una reconciliación. Para lograrlo, ha recurrido a su hijo mayor, el príncipe Guillermo, quien ha asumido la difícil tarea de convencer a Harry de que regrese al Reino Unido para un encuentro privado con su padre.

El príncipe Harry, en el centro del dilema
El problema es que Harry no confía en la familia real. Desde su hogar en California, el duque sigue viendo con recelo cualquier intento de acercamiento. Teme que todo sea parte de una estrategia para mejorar la imagen de la corona y que, una vez más, sus sentimientos sean ignorados en favor del protocolo. Sin embargo, la idea de no despedirse de su padre enfermo también lo atormenta.
La relación entre Carlos y Harry se rompió hace años. La salida del duque de Sussex de la familia real en 2020, junto a Meghan Markle, fue solo el principio de una serie de conflictos públicos que incluyeron entrevistas explosivas, documentales y la publicación de Spare, la polémica autobiografía de Harry. Todo eso convirtió la distancia entre ambos en un abismo. La desgracia podría volverlos a juntar.