A principios de semana os comentábamos cuál era el alimento prohibido de Carlos III en Buckingham. Se trata del hígado de ganso, más conocido como foie gras. Allí no puede entrar este alimento típico francés porque, según Carlos, la producción del foie gras "fomenta el maltrato animal". Un hecho absurdo, puesto que él es el primero en ir a cazar zorros en Inglaterra. Consejos vendo, que para mí no tengo. Made in England, made by Charles The Third.
Ahora, sabemos cuál es su alimento preferido, y también revelamos otro de prohibitivo, otro de vetado, otro de censurado.
De rechupete
No sabemos si Carlos es de ponerse babero cuando desayuna, pero la verdad es que lo hace con consistencia. Ya saben que en Reino Unido el desayuno es mucho más importante que en el resto de Europa. Muchos se zampan alubias con tomate, revuelto de tortilla, faux gras (foie vegano), magdalenas, boiled eggs... Se ponen como toros. Uno que come muy bien, pero más saludable, es Carlos de Inglaterra. El rey es de los de cuchillo y tenedor. Cuando se sienta en la mesa de desayuno no hay quien lo pare: con su periódico real y sus mayordomos sirviéndole como una divinidad, Charles no falla en su cita con... el huevo. Este es su alimento favorito y ordena que siempre sea pasado por agua, con tres minutos exactos de cocción. Sin embargo, una periodista de la BBC cuenta un detalle grotesco, que revela el verdadero rostro del sucesor de Isabel II:
“Como su personal nunca estaba seguro de que el huevo tuviera la consistencia exacta, tomaron la decisión de preparar una serie de huevos y colocarlos en la mesa en una secuencia de cocción creciente. Si el príncipe consideraba que el número cinco estaba demasiado líquido, podía entonces romper la cáscara del seis o el siete”, explica la periodista de la BBC Jeremy Paxman. Alucinante.
De rechupete 2.0
Los huevos se comen de muchas maneras: rellenos, fritos, en revuelto, con jamón, pasados por agua... y también con queso. Este es un plato típico inglés que Su Majestad adora. Se trata de los Cheesy Baked Eggs, unos huevos con queso típico inglés, espinacas, tomates cherry y albahaca. Ñam ñam.
El plato prohibitivo
No solo el foie gras es motivo de despido si algún mayordomo lo sirve en la Casa Real. También el marisco es sinónimo de conflicto. Debido a un virus intestinal que cogió un miembro de 'La Firma' (así se conoce a la Casa Real inglesa) antaño, los percebes, las gambas, los langostinos frescos y cualquier tipo de crustáceo, molusco o derivado son alimentos que no pueden ni degustarse en Buckingham, Clarence House ni ninguna residencia real. Este veto se extiende a todos los miembros de The Royal Family, algo totalmente incomprensible. Incomprensible como lo son algunas monarquías.