Carlos III de Inglaterra parece que ha puesto la directa definitivamente en sus intenciones de remodelar la corona británica. El mandamás del Reino Unido está disfrutando en el trono desde que el pasado 6 de mayo se coronara en la Abadía de Westminster. Esto se le nota en la cara: se siente más seguro, más arropado y más feliz. Tiene en Camilla Parker-Bowles su máximo amor. Es brutal. Ahora, sin embargo, ha tomado una decisión: para aumentar su felicidad en el trono quiere seguir ampliando sus poderes en la monarquía. Y esto pasa por remodelarla.
La remodelación de 'La Firma' es un must en el seno de Buckingham Palace y de esto tomó nota de primera mano Charles The Third desde el momento en el que entró a sustituir a su madre, la difunta Reina Isabel II. Para empezar, decidió quitar unos cuantos títulos y despojar unas cuantas viviendas a algunos miembros de su familia y a ex trabajadores de la monarquía inglesa. Ahora, entre otras cosas, la ha tomado con Angela Kelly, la que fue la sirvienta y principal mano derecha de Isabel. La decisión del Rey seguro que no le ha gustado un pelo a Kelly.
Y es que Kelly ha sido desahuciada del sitio donde vivía. Carlos considera que Kelly ya no pinta nada en Windsor. La sirvienta se había instalado hace años allí con tal de estar cerca de la Reina en sus últimos años de vida y darle más compañía, pero esto parece no tener ahora recompensa, ocho meses después de la muerte de Su Majestad. Kelly era una de las personas que, en toda la vida de la Reina Isabel, más le había acompañado, superando de largo al mayordomo Paul Burrell. Angela Kelly no solo escribió dos libros contando un sinfín de anécdotas de su etapa como sirvienta de la reina, sino que ella era la encargada, entre otras cosas, de probarse los zapatos antes que la propia Isabel para que así a la monarca no se le hicieran rozaduras en los pies. Muy muy fuerte.
Premio de consolación
El 'Daily Mail' ya había sacado con anterioridad la exclusiva de que El Rey Carlos cambiaba muchas cerraduras de las puertas de residencias reales, pero por el momento el de Kelly se mantenía y esta podía entrar en su cas. No obstante, ahora, meses después, la que fuese la mano derecha de Her Majesty The Queen ya ha sido desalojada definitivamente. En las fotos filtradas se ve a una Angela un tanto compungida, pero que no tiene más remedio que tomárselo de la mejor de las maneras. Al final, seguirá viviendo bajo los deseos que tenía la reina, pero no en este chalet: finalmente Carlos III ha decidido mantenerla en una casa, pero con muchas menos prestaciones, el Peak District de Londres. Un premio de consolación, vamos.