El año 2024 está resultando difícil para la familia real británica, ya que está enfrentando desafíos significativos. Por un lado, el 5 de febrero se reveló que el rey Carlos III de Inglaterra está luchando contra el cáncer. Por otro lado, Kate Middleton, quien estaba bajo escrutinio mediático después de someterse a una cirugía y mantenerse fuera de la vista pública, anunció el 22 de marzo que también está enfrentando la misma enfermedad.

Sin embargo, a finales del pasado mes de abril, el rey Carlos III sorprendió al anunciar su regreso al trabajo, retomando los compromisos de su agenda oficial tras un período de ausencia debido a su enfermedad. Según sus médicos, el soberano británico regresó revitalizado y lleno de energía. Su reaparición se destacó en su último compromiso, donde transmitió su título de coronel en jefe del Cuerpo Aéreo del Ejército a su hijo, el príncipe Guillermo.

Alfonso Arús, presentador del programa matutino Aruser@s, ha destacado el buen estado de salud y la nueva apariencia del monarca británico, señalando una transformación física que ha pasado inadvertida para muchos. Al observar imágenes del evento en el que participó junto a su hijo, Arús notó cómo el paso del tiempo parece haber afectado al monarca, sugiriendo incluso que podría haber "encogido", desafiando su estatura oficial de 1,78 metros.

El cambio físico del monarca: ¿una transformación planeada?

"¡Ha encogido muchísimo! El rey Carlos se ha encogido muchísimo", declaró Arús. "Con la edad, crecen ciertas cosas. Le crecen las orejas y la nariz se afila, y le salen pelos por todos lados, menos por donde tiene que salir. Las orejas, como los problemas, crecen", comentó el presentador. Ahora bien, es interesante notar que, contrariamente a lo que se podría esperar, las orejas del rey Carlos III son ahora más pequeñas que en su juventud. Todo indica que el monarca podría haberse sometido a un tratamiento estético para suavizar la forma de sus famosas orejas antes de su coronación. Aunque nunca ha sido confirmado oficialmente, según algunos medios locales, el soberano habría realizado múltiples visitas a su clínica de confianza para someterse a una otoplastia, un procedimiento destinado a corregir la posición y proporción de las orejas.

Carlos III

Este procedimiento es generalmente ambulatorio, lo que significa que los pacientes pueden volver a casa el mismo día de la intervención. Esto se debe a que no implica cirugía mayor ni requiere anestesia general. Por lo general, se utiliza anestesia local o sedación intravenosa, lo que permite que el paciente esté despierto pero cómodo durante el procedimiento. Una vez completada la intervención, se proporcionan instrucciones postoperatorias y se monitorea al paciente antes de ser dado de alta para asegurarse de que se recupere de manera adecuada.

La realidad del envejecimiento: una perspectiva científica

Si bien las especulaciones sobre tratamientos estéticos pueden generar controversia, es importante recordar que el proceso de envejecimiento es natural y afecta a todos, incluso a figuras públicas como el rey Carlos III. Las orejas y la nariz, por ejemplo, son áreas donde los cambios pueden ser más visibles debido al crecimiento continuo de la piel y la pérdida de elasticidad. Sin embargo, es importante destacar que este crecimiento no implica un aumento en las estructuras óseas, sino más bien una alteración en la apariencia causada por la laxitud de la piel y el cartílago.