Carolina de Mónaco es una de las figuras más icónicas en la vida pública del Principado de Mónaco y aún con los años sigue capturando la atención y admiración con cada una de sus apariciones públicas. La hermana del príncipe Alberto II es conocida por su elegancia innata y su estilo atemporal, por lo que en gran medida ha sido una referente en el mundo de la moda durante décadas. De hecho, en una de sus más recientes apariciones públicas, demostró una vez más por qué sigue siendo un referente de estilo a pesar de que tiene 67 años, luciendo un atuendo que no solo destacó por su elegancia, sino que también le restó años de encima.
Carolina de Mónaco con este outfit: sorprende
El look que Carolina de Mónaco eligió para esta ocasión es un ejemplo perfecto de cómo combinar lo moderno y lo clásico sin perder elegancia en el proceso. Llevaba unos pantalones anchos de tipo "oversize" en un tejido satinado de color azul que fueron la pieza central de su atuendo. Cabe acotar que este tipo de pantalón no solo es tendencia, sino que también aporta una comodidad y elegancia que son difíciles de igualar (lo cual explica de cierta forma porque son los favoritos de muchos). Además, el largo de los pantalones de Carolina de Mónaco era tal que apenas dejaba entrever sus zapatillas, algo que quedaba muy bien en conjunto con el resto de sus prendas.
Para complementar esto, la hermana del príncipe Alberto II de Mónaco optó por una blusa de encaje con volantes. Esta elección no sólo realzaba su figura, sino que también aportaba una sensación de ligereza y juventud, lo cual junto con el pantalón ya le resta los años suficientes a la princesa como para decir que “se veía joven de nuevo”.
Sin embargo, nos falta mencionar algo y es que la princesa también llevaba una americana en color crudo, el cual es un tono neutro que sin necesidad de deslumbrar llama mucho la atención, además de que realza la belleza de las demás prendas.
De pies a cabeza, un outfit perfecto
El maquillaje y los accesorios seleccionados por Carolina de Mónaco fueron el toque final de su vestimenta, elevando por completo su estilo y restando números a su edad. Optó por un maquillaje natural, que resaltaba sus rasgos sin sobrecargarlos. Un toque de rubor y un labial en tonos nude que también merecen mención. En cuanto a los accesorios, la princesa eligió piezas discretas pero elegantes, que complementaban su atuendo sin robarle protagonismo, lo cual ha sido la mejor decisión dado el estilo que decidió llevar encima.
El arreglo de su cabello también fue un aspecto destacado de su look y quizás la guinda del pastel. A pesar de que lo llevo con un estilo del que ya es frecuente, no dejó de lucir genial en sintonía con el resto de su vestimenta. Es por este tipo de cosas que consideran a Carolina de Mónaco un referente en la moda, y de seguro seguirá siendo así durante mucho tiempo.