A finales del año pasado el matrimonio de Felipe y Letizia se enfrentó a la mayor crisis de su historia en los últimos años. Una persona muy cercana, un fantasma del pasado, les atacó donde más les dolía. Según Jaime del Burgo, la reina habría sido infiel al rey con él durante varios años. No obstante, cree que el engañado fue él porque el padre de Leonor y Sofía siempre fue el amante. El hijo de Juan Carlos I siempre fue conocedor de esta relación porque según el abogado, ninguno de los dos estaba enamorado, le presentaron a la reina porque era una mujer ambiciosa e iba a aceptar cualquier trato por convertirse en la mujer más poderosa de España. No tenían que mantener relaciones, solo darle descendencia. Pilar Eyre afirmó que el matrimonio ya no existía, sostenía que son “un equipo de trabajo”. Maica Vasco se atreve a calificar el matrimonio de los reyes como “un matrimonio de conveniencia”.
Sea como sea, con las declaraciones de Jaime del Burgo, Felipe y Letizia han decidido dejar de aparentar. Los ciudadanos ya han descubierto el mayor secreto de Zarzuela y ya no hay nada que ocultarles. Como el resto de borbones, el matrimonio no funciona. Han fracasado y habrían decidido cesar la convivencia siguiendo el ejemplo de Juan Carlos I y la reina Sofía.
Felipe y Letizia, más distanciados que nunca, la prueba que confirma el fin de su relación
En los últimos meses no han coincidido prácticamente ni un solo día, solo cuando coincidían en un acto institucional, lo que Pilar Eyre denomina “equipo de trabajo”. Fuera de ello cada uno hacía su vida. Ella quedaba con sus amigas y él con sus amigos. Precisamente este año no contaban con la presencia de Leonor y Sofía, así que podían dejar de fingir para siempre. Felipe VI, por incomodidad, pasaba todos los fines de semana fuera de casa. Letizia se quedaba en Zarzuela. Otras periodistas, como Laura Rodríguez, aseguran que los reyes tendrían otras relaciones en paralelo, se verían con amigos muy especiales.
La semana pasada se les vio poco juntos en Palma de Mallorca, ya que Letizia y Felipe se intercambiaron para apoyar a los deportistas españoles en los Juegos Olímpicos de Paris. Una excusa para no hacer planes juntos sin que nadie diga que están separados.
Como todos los veranos, llega la segunda parte de las vacaciones y huyen por la puerta de atrás. Utilizan su embarcación para marcharse de Palma de Mallorca sin ser vistos, así nadie sabe a dónde dirigen. Pero en esta ocasión han tomado rumbos opuestos. Se sabe que Letizia se habría ido a las islas griegas con amigas y una de sus hijas, la infanta Sofía. Mientras que Felipe VI deberá regresar a Madrid en breve, así que no ha querido alejarse mucho de Palma de Mallorca, pero tiene pensado visitar a su padre en Abu Dabi, ya que el próximo 14 de agosto tiene un viaje oficial a República Dominicana.