El papa Francisco falleció el pasado Lunes de Pascua a los 88 años de edad a causa de un ictus. Entró en coma y no se pudo hacer nada por salvarle la vida. Su estado de salud era muy delicado, como presenciaron las personas que esperaban verle el Domingo de Resurrección en la plaza del Vaticano. Allí se despidió de sus más fieles con un Urbi et Orbi, sin saber que la mañana siguiente no se despertaría. Hace unas semanas recibió el alta hospitalaria tras permanecer 35 días ingresado en el hospital por una neumonía. Se debatió entre la vida y la muerte.
Todos los dirigentes políticos y las máximas representaciones de cada país ya han confirmado su asistencia al funeral del papa Francisco que tendrá lugar el próximo sábado 26 de abril a las 10 horas. Donald Trump, Macron o Milei, entre muchos otros. Pedro Sánchez ha relegado su asistencia en sus ministros, además ha invitado a Feijóo, líder del Partido Popular, a asistir en su lugar. Felipe VI y Letizia no han confirmado su presencia al acto religioso ni tampoco figura en su agenda real, pero es muy probable que asistan. El pasado lunes el monarca envió un telegrama dando sus condolencias a la Iglesia Católica y a todos sus familiares.
Felipe VI no quiere ver a Juan Carlos I en el funeral tras sus últimos movimientos sin consultarle
La reina Sofía ha comunicado a Felipe VI que querría estar presente en el acto religioso, ya que tenía una gran conexión con el papa Francisco, han coincidido en varias ocasiones, y ella siempre ha sido muy religioso. Quien también se ha atrevido a enviarle un comunicado ha sido Juan Carlos I. Le ha expresado su deseo de acudir al funeral y sus intenciones de hacerlo. Sin embargo, su hijo, que está muy enfadado con él por sus últimos movimientos, le prohíbe asistir al funeral en el Vaticano, si no tendrán muchos problemas.
Felipe VI no perdona que Juan Carlos I se haya tomado la justicia por su mano poniéndose de nuevo en el foco mediático. El emérito decidió enseñar a todo el mundo que todavía sigue siendo alguien poderoso y demandó a Miguel Ángel Revilla por vulnerar su honor en su último libro. Pero por culpa del gran apoyo que recibió el político, no tuvo más remedio que demandar también a Corinna Larsen, una de las personas que más daño le han hecho. Incluso asegura que este verano saldrá a la venta su libro de memorias publicado por la editorial Planeta y escrito por una periodista francesa.
Juan Carlos I está harto de vivir solo, siente que se hace mayor y que morirá fuera de su país. Como una persona apestada. Ha querido poner los puntos sobre las íes, aunque tenga que cargarse a su hijo, o a Letizia, su gran enemiga.
