Juan Carlos I tiene miedo por su avanzada edad, sabe que su final está cada vez más cerca y a él le gustaría vivir para siempre. A pesar de su gran fortuna, por ahora la vida es algo que todavía no se puede comprar. No obstante, el emérito se ha sometido a múltiples tratamientos para rejuvenecer y alargar su calidad de vida. En estos últimos años viaja a Vitoria de forma mensual para inyectarse células madre y plaquetas, así mejora su movilidad. Su idea es evitar acabar para siempre en una silla de ruedas. Pero no son los únicos tratamientos a los que se ha sometido el marido de la reina Sofía.
Hace años que Juan Carlos visita Barcelona en el más absoluto secretismo para no levantar polvareda. Lo hace principalmente para reunirse con su médico de confianza. El padre de Felipe VI siempre ha sido un seductor, por todos es sabido que le gustan mucho las mujeres y se ha acostado con más de 5.000. Pero en los últimos años ya no podía seguir el ritmo, así que buscó un tratamiento novedoso para mejorar su rendimiento sexual. Recurrió a "medicamentos indispensables para el jolgorio y el espasmo psicosexual" para satisfacer a todas sus amantes. Estos tratamientos, que incluyen compuestos naturales diseñados específicamente para mejorar su desempeño sexual, le han permitido seguir disfrutando de su mayor vicio.
La perdición de Juan Carlos han sido las mujeres
Ha sido Pilar Eyre quien ha revelado estas informaciones en su canal de YouTube. "Don Juan Carlos se sometió a un tratamiento con testosterona para mantener su vigor sexual y poder contentar a todas las mujeres que frecuentaba", afirma la cronista experta en la casa real, destacando que el padre de Felipe VI necesitaba este procedimiento "para sostener ese ritmo acelerado”.
La testosterona es un potenciador sexual que utilizan muchos hombres para mejorar su virilidad. Juan Carlos I nunca ha perdido el libido. Siempre le han gustado las mujeres, ha sido una de sus mayores perdiciones. Aunque ahora mismo el número de féminas con las que se ha metido en la cama son menores, actualmente mantiene una relación con Marta Gayà, continúa manteniendo relaciones íntimas. Y eso que hay que añadirle sus problemas de cadera.
Juan Carlos I reapareció hace unos meses con un importante cambio físico. Se le vio mucho más joven. Ha rejuvenecido alguna década y eso es porque se somete constantemente a tratamientos estéticos revolucionarios, tal y como afirmó Pilar Eyre. La periodista le enseñó las fotografías del nuevo aspecto del exmonarca a su médico estético. "Yo creo que se ha hecho un tratamiento de factores de crecimiento o plasma vivo en plaquetas. Te sacan sangre, la centrifugan y te la vuelven a poner", explica la periodista.