Letizia es una mujer muy calculadora y controladora, demasiado exigente consigo misma y con los demás. Durante su infancia y adolescencia ha controlado cada uno de los movimientos de sus dos hijas, y es cierto que en gran parte gracias a alejarlas de los Borbón, tanto la futura reina de España como la infanta reciben un aprobado con nota por parte de la ciudadanía española. Por este motivo la exigencia es máxima, y la reina no quiere que cometan ningún error ahora que están en una época delicada y vuelan solas.
Leonor y Sofía hace años que no viven en Zarzuela, más la primera. Desde los 16 años decidieron estudiar bachillerato internacional fuera de España, en Gales. Mientras que se espera que la infanta vuelva este verano para ir a la universidad en Madrid, la princesa continúa con la formación militar, ahora navegando a bordo del buque escuela Juan Sebastián Elcano, con el que recorrerá ocho países en seis meses.
La reina echa de menos a su hija, nunca habían estado tanto tiempo separado ni tan incomunicadas, ya que a bordo del barco solo puede comunicarse con ella mediante satélite. Fue el pasado 14 de febrero, día de los enamorados, cuando por fin puso un pie en tierra en San Salvador de Bahía, Brasil. Después de 22 días de travesía, Leonor le descolgó el teléfono y hablaron casi una hora.
Leonor ha tenido unos días de descanso y ha aprovechado para ver en primera persona los famosos carnavales de Brasil que calientan motores con fiestas por todo el territorio. El pasado sábado por la noche estuvo presente en una de esas fiestas con sus compañeros guardiamarinas. Un fotógrafo hizo unas fotografías sin saber que allí estaba Leonor y la vio derrochando una gran complicidad con un compañero.
Casa Real podría dar un comunicado sobre lo sucedido
Se dijo que cuando le quiso hacer una fotografía a ella y a este joven los escoltas le echaron de mala manera y le obligaron a borrar algunas imágenes. Él asegura que Leonor se besó con su compañero. Casa Real ha estado informada de este suceso y asegura que es mentira, ni la princesa se besó con ningún chico aquella noche ni tampoco se echó al periodista a empujones y se le obligó a borrar su material. Eso deja en muy mal lugar a los escoltas que acompañan a la princesa.
Letizia está muy molesta por estas declaraciones y volvió a sufrir una nueva crisis nerviosa al leer todos los titulares, una crisis sin precedentes. ESdiario se ha puesto en contacto con fuentes próximas a la Casa Real y han negado los hechos. Además han asegurado que “existe indignación total por difundir esa noticia que no sólo no se corresponde con la realidad sino que implica también a la seguridad de La Zarzuela”. Y es que la información sugiere prácticas poco éticas de los escoltas de la heredera. Las mismas fuentes oficiosas desmienten “rotundamente” la veracidad de esta información.
