Charlene de Mónaco, esposa del príncipe Alberto, se encuentra en el centro del foco mediático una vez más, pero en esta ocasión por su supuesto affaire con un multimillonario ruso, ex novio de la top model Naomi Campbell. La noticia de esta infidelidad por parte de la ex atleta olímpica ha surgido en medio de los rumores de una profunda crisis matrimonial entre los príncipes monegascos y la supuesta firma de un acuerdo millonario para “mantener las apariencias” de familia feliz dentro del Palacio Grimaldi.
A pesar de que Alberto II de Mónaco ha negado en un sinfín de ocasiones que su matrimonio está condenado al fracaso, lo cierto es que los rumores de separación han ido en aumento debido a la aparente infelicidad de Charlene y las noticias de que ella ha buscado consuelo en los brazos de su amante, el magnate ruso Vladislav Doronin, mientras el príncipe Alberto se va de fiesta a Chipre sin ella.
Cabe recordar que hace algún tiempo también comenzaron a rondar algunos rumores sobre las infidelidades de la pareja, pero en ese momento la culpa recaía en el soberano monegasco, quien aparentemente había engañado a Charlene con una mujer brasileña que habitaba en Italia y con la que habría tenido su tercer hijo fuera del matrimonio. Sin embargo, ahora la situación parece haber dado un giro de 180°, y es Charlene quien está en el ojo del huracán por su affaire con Vlad Doronin, el hombre que demandó a Naomi Campbell por haberse quedado con tres millones de dólares en pertenencias tras haber culminado su relación de cinco años en 2013.
El romance entre Charlene y Doronin habría comenzado hace poco más de un año, mientras la princesa estuvo recluida en la clínica de rehabilitación Paracelsus Recovery en Zúrich para recuperarse de un profundo “agotamiento mental y físico”, aunque ambos se conocen hace más de una década y existe una foto de ellos junto a Naomi Campbell unos días antes de su boda con el príncipe Alberto. Según informa el tabloide británico ‘The Sun’, la princesa de Mónaco y el magnate ruso han estado en contacto desde hace meses y ella se ha refugiado en él para escapar de su realidad en el Principado. “Toda la historia es muy compleja y confusa, pero Charlene y Vlad están en contacto y pasaron tiempo juntos. Parece que ella ciertamente ha encontrado ayuda de él recientemente en medio de sus problemas matrimoniales. Se conocen desde hace un tiempo y Vlad estuvo en la boda de la princesa cuando estaba con Naomi”, reveló el citado medio.
Las vidas paralelas de Charlene y Alberto de Mónaco
De acuerdo con el diario británico, Charlene y Alberto han estado haciendo vidas separadas desde que ella regresó a Mónaco, de modo que la unión familiar que se ve en los medios no es más que una estrategia de marketing para vender una falsa imagen de estabilidad familiar dentro del Palacio. Así que, mientras la ex nadadora olímpica disfruta de la compañía de su nuevo interés amoroso, el príncipe Alberto ha tomado la decisión de divertirse en Chipre, convirtiéndose en el príncipe de las fiestas en la nación mediterránea.