Charlene de Mónaco recupera su agenda de compromisos institucionales después de sus misteriosas desapariciones. Mucho se ha especulado sobre un posible divorcio entre los príncipes, pero Alberto de Mónaco se ha encargado de negarlo. La conocida como princesa triste se mantuvo apartada más de medio año. En febrero de 2021 acudió a Sudáfrica y permaneció ingresada en un centro de rehabilitación. Se dijo que tuvo que ser operada por una infección en los oídos, pero la verdad es que padecería una adicción a los somníferos que todavía no ha logrado superar. La nadadora sufriría una depresión por su relación con el príncipe.
Alberto de Mónaco y Charlene tienen 20 años de diferencia, él 65 y ella 45. La sudafricana se casó por obligación. Minutos antes de la boda estuvo a punto de abandonar y dejar tirado al príncipe en el altar, toda una humillación. La interceptaron y no se lo permitieron. Se casó, pero no mantuvo ningún tipo de relación con el hijo de Rainiero y Grace Kelly, ni tan siquiera íntimas. No duermen juntos. Tuvieron descendencia también por obligación. Era una cláusula del contrato matrimonial. Los hijos del matrimonio nacieron mediante fecundación in vitro.
Charlene y Alberto no mantienen relaciones íntimas: obligada a casarse y a tener hijos
No podían quedarse sin descendencia. La prima de Charlene, Christa Mayrhofer-Dukor, concedió una entrevista y reveló que la nadadora sufrió un aborto que no trascendió a la prensa. “Sé que fue un momento muy difícil tanto para ella como para Alberto, que sufrió mucho por este tema”. Asegura que ambos tuvieron mucho miedo por el futuro de la corona. “Incluso los dos llegaron a pensar que nunca más se quedaría embarazada y no podrían dar un heredero a la Corona“, señala.
Podría ser este el motivo por el que Charlene estuvo triste durante años, pero aún teniendo a sus dos hijos mellizos continúa presentándose sin esbozar una sonrisa. Respecto al nacimiento de los mellizos, Christa declara: “Charlene se sometió a una fecundación in vitro un tiempo después, pero aún así tuvo que ser muy prudente durante todo el embarazo y correr riesgos”.
En más de una ocasión se ha especulado sobre la orientación sexual de Alberto de Mónaco. Era conocido como el soltero de oro, ya pensaban que se iba a quedar sin casarse y sin hijos. Se habló de una supuesta homosexualidad cuando se le vio en una fiesta del orgullo LGTBI. Él ha negado rotundamente esas informaciones.
Charlene y Alberto habrían atravesado una fuerte crisis en su matrimonio. En alguna ocasión le habría pedido marcharse de palacio. El aristócrata no piensa concederle el divorcio. Ya le ha comunicado que si toma esa decisión no vería más a sus hijos ya que se quedarían en palacio. Ella se iría a vivir a Suecia. Si no hace pública una ruptura y mantiene su agenda institucional, Alberto le pagaría millones de euros anuales.