La figura de Jaime del Burgo ha emergido con fuerza en la escena mediática en los últimos meses, gracias a sus mensajes incendiarios en las redes sociales y desatando una ola de controversia. Entre sus afirmaciones más polémicas se encuentra la revelación de infidelidades de la reina Letizia al rey Felipe VI de forma intermitente y reiterada en el tiempo. Detalles, algunos de los cuales, aparecen en el libro de Jaime Peñafiel titulado "Letizia y yo".

Sin embargo, según Peñafiel, lo expuesto hasta ahora es solo una fracción mínima de lo que Del Burgo está dispuesto a revelar. Se dice que el 99% restante será plasmado en un libro que verá la luz este mismo año. Este material explosivo se presume contener secretos e intimidades de Letizia que aún no han salido a la luz, incluyendo detalles sobre sus abortos, encuentros con el abogado y humillaciones hacia Felipe VI, así como problemas en la intimidad con el rey.

Jaime del Burgo guarda silencio mientras sigue centrado en su libro

En las últimas semanas, Del Burgo había desaparecido del mapa. Incluso borró todos los mensajes publicados en X, antes Twitter. Y algunas fuentes señalaron que había cedido a las presiones de la casa real para que no publicara el libro. Pero estas fuentes no podían estar más equivocadas. Lo cierto es que Jaime ha estado centrado en su trabajo. Ha querido evitar interferencias. Y borrar los mensajes de la red social responde a que quiere incluir todo el material en su relato.

Ahora Del Burgo ha vuelto. Únicamente ha colgado una foto suya. Pero es suficiente para advertir de que sigue al pie del cañón.

Jaime del Burgo mensaje X

Del Burgo solo quiere contar su verdad

Desde la Casa Real ya se intentó frenar la situación, ofreciendo a Del Burgo mediante terceros un cheque en blanco. No tanto por Letizia, sino por la posible repercusión negativa en la imagen de Felipe VI y hacia la monarquía. Sin embargo, el abogado rechazó la oferta, demostrando su determinación de no ceder al chantaje y de exponer la verdad en su obra.

Con su silencio y desaparición, la Casa Real creyó haber ganado una batalla, pero Del Burgo dejó claro que no se dejará intimidar. Su negativa a ser silenciado y su compromiso con la honestidad reflejan su determinación de hacer públicos los secretos que afirma conocer, sin importar las consecuencias para la monarquía.