Jaime del Burgo ha dejado claro su punto de vista con firmeza. Según sus declaraciones, Letizia habría sido desleal a Felipe durante un largo periodo de tiempo con él. Esta supuesta infidelidad, según Del Burgo, retrata a la reina como alguien que ha incumplido su compromiso matrimonial, y sería este el verdadero origen de los problemas conyugales entre los monarcas, más que cualquier intervención de Juan Carlos o la encarcelación de Iñaki Urdangarin. Desde el inicio, el matrimonio entre Felipe y Letizia estuvo marcado por una dinámica disfuncional, ya que, según Del Burgo, Letizia no se casó por amor, sino motivada por la ambición de convertirse en la figura más influyente de España. Esta perspectiva sugiere que Letizia, siendo una persona ambiciosa, no habría dejado pasar la oportunidad de llegar al poder.
El exesposo de Telma Ortiz ha traído a la luz esta supuesta infidelidad, aunque no es la primera vez que se habla de traiciones en la vida de Letizia. Se ha insinuado anteriormente que también fue infiel a Alonso Guerrero, su primer marido, mientras trabajaba en México. Durante ese periodo, su relación con el profesor de literatura pasaba por dificultades, y aunque intentaron darse un respiro, Alonso continuaba llamándola insistentemente, lo que, según personas cercanas a la pareja, generaba frecuentes discusiones cada vez que ella respondía al teléfono.
En su juventud, Letizia tenía fama de disfrutar de la vida nocturna, de las fiestas, el alcohol y la compañía masculina. Era vista como una mujer atractiva y seductora, lo que la hacía objeto de deseo para muchos. Durante su estancia en México, se sabe que tuvo varios encuentros amorosos esporádicos, aunque uno de ellos fue particularmente relevante y se mantuvo en secreto por la Casa Real cuando Felipe informó a sus padres que Letizia, entonces presentadora de TVE, sería su futura esposa y reina consorte de España.
El CNI ha intentado silenciar a la esposa del amante de Letizia con una cifra de seis ceros
Se ha rumoreado que Letizia engañó a Alonso Guerrero con el director de un periódico, y que, durante esa relación, habría sufrido dos abortos. El primero de estos abortos se atribuye a una relación que mantuvo con su jefe en el periódico Siglo XXI, según el periodista Joaquín Abad. Letizia habría quedado embarazada y decidido interrumpir el embarazo. Para evitar un escándalo, el CNI, bajo las órdenes de Juan Carlos, habría intervenido para silenciar a la esposa del amante de Letizia. Aunque el periodista en cuestión prefirió guardar silencio para proteger su carrera y su vida personal, su esposa estuvo cerca de revelar la relación por resentimiento. Según se dice, existen pruebas visuales que respaldan esta historia.
Jaime Peñafiel, en su libro "Letizia y yo", cuenta cómo en 2014 fue contactado por la esposa del amante casado de Letizia. Esta mujer se identificó como la esposa del director del periódico Siglo XXI, donde Letizia trabajó durante su estancia en Guadalajara en 1995. Ella relató que su esposo ocupaba un cargo importante en el periódico y que Letizia habría manipulado la situación para avanzar en su carrera. Al descubrir la aventura de su esposo, la mujer pidió el divorcio, y en la actualidad posee información que confirma la relación, lo que ha despertado el interés de algunos medios de comunicación.