Felipe y Letizia continúan con su agenda institucional completamente separados. El pasado fin de semana el rey viajó a El Salvador y este martes la reina viajaba a Guatemala hasta el próximo viernes. Prácticamente toda una semana sin verse. Por estes compromisos ya se confirma que los monarcas no están en su mejor momento e intentan evitarse para pasar el menor tiempo posible juntos.
Según Maica Vasco, la relación entre Felipe y Letizia sería una farsa desde el primer momento. Laura Rodríguez informó que el entonces príncipe no iniciaba una relación con ninguna mujer porque era homosexual, y no por timidez como hicieron creer. Todas las mujeres que mantuvieron una relación sentimental con el hijo de Juan Carlos fueron buscadas por la agencia de Javier Hidalgo, según Isidre Cunill. Como Letizia, el príncipe pidió “chicas guapas de la tele”.
Maica Vasco afirma que la relación entre Jaime del Burgo y Letizia no fue una infidelidad, ya que Felipe era conocedor de esa relación y la aceptó. Era consensuada por los tres protagonistas de la historia. Cuando conoció al príncipe, la periodista mantenía una relación sentimental con el abogado. A la ahora reina se le ofreció la posibilidad de pertenecer a la corona a cambio de dar descendencia al rey. Su ambición le hizo aceptar la proposición, recibiría beneficios económicos y privilegios. Solo debía aparentar ser una familia feliz y atender sus obligaciones institucionales.
El CNI firmó un acuerdo con Letizia por su silencio
Letizia se vio sobrepasada, la corona no era para ella. Quería marcharse con Jaime del Burgo con quien realmente era feliz. Sin embargo, ya no tenía oportunidad de salir de allí. Además, estaba embarazada de Leonor, hubiese sido un escándalo dejar al rey estando casados y embarazada.
Jaime del Burgo destapó hace unos meses la doble vida de Letizia. Según el abogado pretendían marcharse a Miami y formar una familia mediante la gestación subrogada. La reina amenazó con explicar toda la trama. El CNI tenía mucho miedo de que toda la historia saliese a la luz pública y Felipe, futuro rey de España en aquella época, quedase retratado.
Se debía ocultar la verdadera orientación sexual de Felipe, según Laura Rodríguez. No estaría bien visto que un monarca fuese homosexual, pero lógicamente no formaría una familia. A su lado debía existir la figura de reina consorte.
Esto sucedió en 2012, cuando Felipe y Letizia atravesaron la crisis más profunda de su matrimonio.