Para colmo de Letizia, Juan Carlos se ha puesto de nuevo en el foco mediático. Primero con la fundación que ha creado en Abu Dabi para facilitar la herencia a las infantas Elena y Cristina, posteriormente con un libro con sus memorias que se desconoce si finalmente verá la luz pero que ya estaría escrito, y esta misma semana con las fotografías que corroboran el romance con Bárbara Rey. Siempre se ha hablado de la relación que tuvieron la vedette y el emérito, pero nunca se filtró ni una sola fotografía porque Casa Real las evitó.
Ahora se ha hecho público un instante de intimidad entre ellos. Los dos aparecen besándose en la casa de la vedette. Se vieron durante décadas a escondidas. Unas imágenes que han hecho mucho daño a la reina Sofía, quien nunca quiso creer que su marido la engañaba con otras hasta que tuvo pruebas suficientes. Frenaron esas imágenes por la imagen de la corona y para no causar una humillación pública a la emérita.
El CNI controló todos los movimientos de Juan Carlos con las mujeres
Ha sido la prensa holandesa la encargada de publicar estas imágenes que habrían sido filtradas por Ángel Cristo Jr como venganza a su madre y habría cobrado un alto precio por ellas, tanto económicas como personal. "Espero que a Bárbara no le moleste que cuente esto", afirmaba Susanna Griso en 'Espejo público' mientras trataban el tema. "A principios de verano me dice 'estoy preocupada porque Ángel me ha sustraído unas fotos y no sé qué uso va a dar a estas fotografías, pero no sé si será venderlas'". La revista holandesa no ofrece dudas al respecto. En la propia publicación señalan al hijo de Bárbara Rey como autor de las fotografías. "Con estas fotos el rey Juan Carlos fue chantajeado por una de sus muchas amantes, la ex actriz y estrella de televisión Bárbara Rey”.
"Ella usó a su hijo Cristo Jr, que entonces tenía 13 años, para hacer las fotos en secreto, le hizo ganar mucho dinero, por venganza hacia su madre y para destapar sus mentiras Ángel ha contado esta impactante historia", explica la publicación.
Pero habría mucha más información gráfica para ver la luz con otras mujeres. El Estado tuvo que pagar mucho dinero para silenciar las relaciones extramatrimoniales de Juan Carlos. Por este motivo, el CNI pensó en establecer un piso franco donde el emérito pudiese tener sus relaciones. Primero en Majadahonda y luego en otros dos lugares más accesibles. El seguimiento lo realizaba el CNI.