El mundo de la realeza no solo está lleno de tiaras y tronos, ¡también hay espacio para los coches deportivos! ¿Y qué mejor muestra que el Audi RS6 que perteneció al príncipe Harry de Inglaterra y que ahora se encuentra disponible para coleccionistas y amantes de los autos veloces?

Coche de Harry
Coche de Harry

Aunque podría parecer lo contrario, la familia real británica no se limita a usar solo automóviles fabricados en el Reino Unido. En realidad, han tenido acceso a un acuerdo especial de alquiler con Audi en el pasado. El hijo del rey Carlos III, quinto en la línea de sucesión al trono, adquirió el RS6 Avant en 2017, pero lo puso en venta un año después de casarse con Meghan Markle.

Rendimiento y estilo real: ¡una verdadera joya!

La principal característica del RS6 del Príncipe Harry es su color Gris Daytona, un acabado especialmente popular y discreto para este tipo de coche familiar de alto rendimiento. Además, ha sido equipado con otros detalles lujosos, como un techo corredizo panorámico, vidrio de privacidad, el paquete dinámico, suspensión deportiva RS con Dynamic Ride Control y Night Vision Assist.

Bajo el capó, este RS6 alberga un V8 biturbo que no decepciona, alcanzando velocidades máximas de 174 mph y una aceleración de 0 a 60 mph en solo 3,9 segundos. En su interior, el lujo se hace evidente con detalles en cuero negro y una gran cantidad de detalles en fibra de carbono. Asimismo, el vehículo incluye un sistema de sonido Bose, asientos con calefacción y una pantalla de información y entretenimiento de siete pulgadas. Aunque no es el interior más llamativo que se haya visto en un RS6, su diseño se complementa bien con el esquema de pintura sencillo y discreto, lo que lo hace perfecto para aquellos que desean mantener un perfil bajo.

Una oferta irresistible: el valor del pasado y la oportunidad futura

Este RS6 ya ha estado en el mercado antes: en agosto de 2018, se ofertó en Autotrader por 86,100 euros con solo 7,184 kilómetros recorridos. Según el vendedor, el precio original del vehículo era de 105,500 euros, con opciones que sumaban 12,800 euros. A diferencia de otros autos de famosos en venta, el precio actual no supera esta cantidad inicial, a pesar de haber sido propiedad de un miembro de la familia real británica. Sin embargo, en cinco años ha experimentado cambios significativos en el precio y kilometraje. El V8 biturbo de 560 CV ha acumulado 109,000 kilómetros, y ahora se anuncia en Pistonheads por 48.000 euros.

Es cierto que su valor actual no está para nada mal, pero en 20 o 30 años, la situación podría cambiar considerablemente. Y es que, a pesar de que otros miembros de la Familia Real, como la difunta princesa Diana, la fallecida reina Isabel II o su hermano, el príncipe Guillermo, heredero al trono británico, sean más reconocidos que Harry, adquirir ahora el RS6 de Harry por 48,000 euros podría convertirse en una inversión muy inteligente a largo plazo. Los valores de los vehículos asociados a figuras públicas a menudo pueden aumentar significativamente con el tiempo, especialmente cuando hay un interés histórico o una conexión emocional con el propietario anterior.