Ha sido la imagen de la semana en clave monárquica. Letizia, arrodillada buscando una joya que le cayó de la muñeca, con su marido Felipe a su lado plantado como un pasmarote sin darse cuenta de nada y su mujer a los pies, recogiendo la pieza que le cayó. Una imagen que ha sido carne de memes y que se produjo durante una de las habituales recepciones con tufo a naftalina a los cuerpos diplomáticos.

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Felipe y Letizia / GTRES
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Letizia, por los suelos GTRES
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Felipe, por los suelos

Una imagen que se ha analizado del derecho y del revés y que tiene muchas cosas que comentar, más allá de la evidente, que habla por sí sola, que es la imagen en sí. Y es que no es la primera vez que luciendo este mismo vestido le pasaba una cosa similar. La otra vez que se puso este precioso vestido azul también le cayó una joya, pero aquel día Felipe sí que estuvo más atento y se dio cuenta y la recogió. Una prenda de ropa, pues, que o bien está maldita o bien le trae mala suerte, mal fario que dicen. Pero todavía hay más sobre este outfit, y es que la joya que no le cayó, la que llevaba en el cuello, también tenía un simbolismo muy especial, y es que fue un regalo de sus queridos suegros Juan Carlos y Sofía cuando Letizia se prometió con el príncipe Felipe y se iban a casar. Un gesto hipócrita de la reina en medio de la tormenta Del Burgo, ya que entre todas las acusaciones e indirectas de adulterio y de qué siente por su examante, el empresario navarro, ella ha querido tener un gesto con su marido, con quien justamente este 2024 celebra el 20.º aniversario de casados. Un gesto como diciéndole a Del Burgo que ella sigue enamorada del Borbón y no de él... Un gesto que no se cree nadie.

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Letizia / GTRES
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El mismo collar, el año 2004

La escena ha dado para mucho y evidentemente, en el maravilloso Aruser@s de La Sexta no han desperdiciado la oportunidad para analizarla. El humorning show que presenta cada día Alfonso Arús con un éxito incontestable se ha hecho eco de la mala suerte que lleva este vestido azul, que hace que le caigan las joyas siempre que se lo pone. Y han querido contar con la ayuda inestimable de alguien que entiende de cuestiones inexplicables, del más allá, un vidente como el Maestro Joao. No le han pedido esta vez que leyera ningún culo para ver qué futuro se les presenta a Felipe y Letizia, pero sí que le ha dado a la reina un atrevido consejo para que deje atrás el vestido o quien sabe si las joyas también traen mala suerte.

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Maestro Joao / La Sexta

Para evitar o contrarrestar que alguien le haya hecho un mal de ojo a Letizia o a su vestido, el vidente tiene claro qué tiene que hacer la asturiana para "limpiar" su vestido "como, atención, sus joyas, porque puede ser que el problema venga del broche o de la pulsera". Y atención a la frase que suelta, remitiendo a antiguas monarcas que no acabaron con la cabeza encima de los hombros...: "Igual eran de alguna de estas a las que mandaban cortar la cabeza". ¿Qué tiene que hacer Letizia según Joao?: "Poniéndolas en un bol con sal gorda, simplemente, durante unos 15 minutos a la luz de la luna, se limpiarían". Eso con respecto a las joyas, pero ¿y si el problema es el vestido?: entonces toca tomar una drástica decisión: "No queda más remedio que deshacerse de él, porque aunque lo hagas retales, no serviría". Una tercera opción sería: "Las joyas me las puede dar a mí y yo se las limpio"... El Maestro Joao recomendándole a Letizia que haga limpieza... No nos extrañaría nada que también se refiera a su matrimonio y algún día Letizia haga poner a Felipe con los pies en un bol con sal gorda, 15 minutos a la luz de la luna.