Corinna Larsen no piensa quedarse de brazos cruzados. Quiere vengarse de Juan Carlos I como sea. Finalmente se libró de la batalla jurídica en Reino Unido. La empresaria le demandó por presuntas amenazas para que no sacara a la luz documentación que pudiera “incriminarlo”. Tras esta derrota, la alemana rompió su silencio en un exitoso podcast donde el gran protagonista de forma indirecta era el emérito, con quien mantuvo una relación extramatrimonial durante varias años. Y parece que aún tiene muchas cosas que contar. El próximo mes de mayo Sky estrenará un documental sobre los episodios más oscuros del monarca, algunos que ni tan siquiera se conocen a día de hoy. Personas de Casa Real intentaron frenar su emisión con amenazas, pero no lo consiguieron. La fecha continúa vigente. Una vez más, Juan Carlos estará en boca de todos en la prensa internacional por culpa de Corinna Larsen, a quien ya no logran callar ni por millones de euros. Desde luego que lo que se pueda decir no va a beneficiar en absoluto a Zarzuela. Felipe y Letizia vuelven a estar en tensión, y precisamente esta nueva polémica habría sido el detonante de su última crisis.
En 2013, el caso Nóos enturbió a Zarzuela. Sin embargo, el único que pagó las consecuencias fue Iñaki Urdangarin, pero no el único supuesto culpable. Se dijo que la infanta Cristina, Juan Carlos I e incluso Felipe eran conocedores de todos los movimientos del exduque de Palma. Pero le obligaron a culparse él mismo de todos los trapos sucios. Incluso se podría haber pagado tres millones de euros para exculpar a la infanta y apartarla de todo este asunto. Si se le hubiese declarado culpable, sería un auténtico terremoto en Zarzuela.
Felipe VI estaba al corriente de todos los movimientos de Iñaki Urdangarin
Diego Torres, el exsocio de Iñaki Urdangarin, entregó al juez del caso Nóos, José Castro, varios correos electrónicos con los que trató de probar que Felipe VI conocía todas las actividades de su todavía cuñado y que toda la Casa Real las amparaba. Su abogado defensor incorpora misivas remitidas por el esposo de la infanta Cristina al entonces Príncipe de Asturias, con las que intenta demostrar que entre ambos había una relación de confianza. En esos correos, también figuraba que Urdangarin participó en la organización de la despedida de soltero del Príncipe.
En aquella época, Felipe VI no solo obligó a su padre a abdicar, y posteriormente lo exilió, sino que además renunció públicamente a su herencia, de casi dos millones de euros. Intentó desligarse de cualquier relación con Juan Carlos. La corona pendía de un hilo y estuvo a punto de desaparecer. Con una fuerte crisis en el matrimonio, y movimientos drásticos, los actuales reyes consiguieron salvarse de la quema.
No obstante, una vez más la sombra de Corinna Larsen e Iñaki Urdangarin pesa demasiado. Los dos han vuelto a la carga y amenazan a Casa Real con tirar de la manta y destapar toda la verdad con pruebas. Su silencio va a costar muy caro.