Letizia fue la protagonista del último viaje de Estado por saltarse el protocolo en la cena de gala que organizaron Guillermo y Máxima de Holanda para los reyes de España en el Palacio Real de Ámsterdam. La reina no podía hacer otra cosa y es que era un motivo de peso. Como ya hemos contado en más de una ocasión, debido al uso excesivo del tacón alto, la madre de Leonor y Sofía sufre desde hace años el famoso neuroma de Morton, afecta al metatarso, generalmente entre el tercer y cuarto dedo del pie. No obstante, esta no es la única dolencia en el pie que experimenta la mujer de Felipe, ya que también ha sido diagnosticada con una metatarsalgia crónica.

Las personas que padecen esta afección describen la sensación como si tuvieran un objeto incómodo dentro del zapato o una arruga en el calcetín. Se presenta con un dolor agudo, que se asemeja a una picazón, acompañado de entumecimiento en los dedos. A pesar de esto, no se observa ningún signo visible de la enfermedad desde el exterior.

Letizia, assegura durant el besamans (EFE)

Debido a que Letizia estuvo todo el día de pie porque visitaba diferentes sitios de Ámsterdam y La Haya, por la noche su pie izquierdo ya no aguantaba más presión. Estaba destrozada. Por salud, el médico le obligó a quedarse sentada. Guillermo, Máxima y Felipe saludaron a los invitados de pie, mientras que la madre de Leonor y Sofía se quedó sentada.

La única solución para el dolor en los pies de Letizia, los médicos son claros

La mujer de Felipe ha tenido que olvidarse de los tacones altos. Para aliviar el dolor suele tomar analgésicos, pero a veces, como en esta ocasión, no es suficiente. Es probable que Letizia deba operarse de urgencia al incrementarse cada vez más el dolor. Por ahora ha ido calmándolo con infiltraciones de corticoides en cantidades mínimas para aliviar la inflamación o con ácido hialurónico, que desinflama y forma una especie de acorchamiento que puede evitar el dolor.

Parece que estas infiltraciones no han funcionado, como se ha podido comprobar, así que Letizia tendrá que pasar por quirófano. La reina se ha cansado de su médico de confianza, quien le hacía las infiltraciones. Le culpa a él de que el tratamiento no esté funcionando y se ha buscado a otro.

Letizia ha vuelto a perder el control de la situación. Nuevamente ha quedado cuestionada. Es una mujer muy controladora y calculadora.

Letizia holanda gtres