Felipe VI y Letizia ya no quieren esconderse más, están hartos de mostrar que todo está bien. Durante mucho tiempo, en los pasillos de la Zarzuela se guardó con gran hermetismo un secreto que, finalmente, terminó saliendo a la luz gracias a Jaime del Burgo. Este abogado reveló públicamente que la reina había mantenido una relación extramatrimonial con él durante varios años, un dato que la Casa Real ni ha confirmado ni ha desmentido. Mientras algunos consideran que esta revelación forma parte de una estrategia para desprestigiar a la monarca y restarle poder, otros creen que ha servido para que ambos puedan llevar vidas independientes sin necesidad de disimular.

Desde hace dos años, los reyes ya no conviven con sus hijas y, en consecuencia, han dejado de fingir una unidad que, al parecer, no existe. Felipe VI decidió mudarse al Palacio de la Zarzuela, donde reside junto a su madre, la reina emérita Sofía, su tía Irene de Grecia y otros familiares que lo visitan ocasionalmente. Por su parte, Letizia permanece en el Pabellón del Príncipe, una residencia ubicada dentro del mismo complejo real y construida originalmente para Felipe. Aunque la distancia entre ambos domicilios es relativamente corta, lo cierto es que sus vidas han tomado rumbos distintos. Las apariciones conjuntas de los monarcas se reducen a eventos institucionales y compromisos familiares ineludibles, como la inminente celebración del cumpleaños de la infanta Sofía, cuando alcanzará la mayoría de edad. Por motivos de seguridad, cada uno viaja en vehículos separados.
La separación efectiva se produjo cuando la infanta Sofía dejó España para cursar el bachillerato internacional en Gales. Fue en ese momento cuando Jaime del Burgo hizo pública la supuesta infidelidad de la reina Letizia, destapando así lo que muchos ya sospechaban. Desde entonces, los monarcas han llevado vidas independientes, cada uno con sus propias rutinas y círculos sociales.
Felipe VI y Letizia no viven juntos desde que Jaime del Burgo rompió su silencio
Felipe VI ha sido visto en diversas ocasiones disfrutando de su tiempo libre con amigos, ya sea en estaciones de esquí o en distintos puntos del país. Por otro lado, Letizia ha modificado su agenda institucional para reservar los viernes y emprender escapadas de fin de semana, muchas veces fuera de España.
Según la periodista Laura Rodríguez, ambos han encontrado nuevas compañías sentimentales. A Felipe VI se le relaciona con una acaudalada heredera vinculada al linaje de Franco, mientras que a Letizia se le atribuye una relación con un empresario catalán con quien siempre ha mantenido una buena amistad.
Recientemente, el rey aprovechó el último fin de semana de marzo para esquiar en Valdelinares, disfrutando de las recientes nevadas en la región. Al ser preguntado sobre su elección de destino, comentó que era un lugar hermoso y con buena nieve, aunque admitió que el trayecto hasta allí había sido complicado.
Aunque oficialmente siguen casados, en la práctica llevan vidas separadas, siguiendo un modelo similar al que en su momento adoptaron Juan Carlos I y la reina Sofía. Así, proyectan la imagen de un matrimonio moderno y tolerante, aunque la realidad sea otra: la convivencia terminó hace tiempo.
