Felipe Juan Froilán de todos los Santos, sobrino del rey Felipe VI, es el cuarto en la línea de sucesión al trono y suele ser el miembro de los Borbones con más polémica. Muchos de los titulares que protagoniza hablan de los excesos que comete desde muy joven, dejando en evidencia a la Casa Real en el proceso. Y es que sus aventuras nocturnas son habituales en las crónicas digitales y en las que se citan desastres de toda índole. Por eso no nos sorprende demasiado saber que desde Zarzuela han tenido que intervenir para evitar que salgan a la luz determinadas informaciones.
Hace más de un año que los reyes obligaron a la infanta Elena a tomar una firme decisión en cuanto a Froilán. A pesar de guardar distancias con el resto de la familia, Casa Real se ha visto salpicada por las travesuras del joven. Entre sus últimas historias nocturnas está aquella en la que participó en una pelea con arma blanca frente a una discoteca en Salamanca. La policía le dejó ir porque acompañó a un amigo que resultó herido al hospital. Después de eso, salió de un after ilegal que tenía licencia de sauna. En dicho local se encontraron con sustancias estupefacientes.
El nieto de Juan Carlos I intentó limpiar su imagen dejando claro que eran exageraciones, desmintiendo que él tuviera participación en estos sucesos. Sin embargo, siempre acaba en los sitios donde suceden toda clase de reyertas, desalojos y redadas y se descubren drogas. Inclusive, en su lista de contiendas hay hasta un tiroteo. Y, pese a todo, Casa Real ha tenido que hacerse cargo de alguna catástrofe peor.
La escolta se enfrenta a escenarios turbios por Froilán
Los hijos de Elena de Borbón se caracterizan por ser mimados desde muy pequeños. Muy pronto aprendieron que no había castigo o consecuencia de sus acciones, pues eran niños privilegiados. Froilán, tanto como Victoria Federica, no respetan normas y se creen por encima del resto por llevar el apellido Borbón.
Si algo sabe hacer el sobrino díscolo del rey es festejar a lo grande. Desde su adolescencia le gustan las fiestas y esa ha sido la preocupación que han expresado desde su entorno. Día tras día, se dedicó a reunirse con su pandilla con cualquier excusa. No solo los locales y discotecas que estaban de moda, sino aquellos clandestinos. Así se ha puesto en riesgo en más ocasiones de las que se pueden contar. Algunas han trascendido inevitablemente, otras no. Si algo debe agradecer a la Corona, es que han intentado mantener su vida nocturna en secreto.
Hubo épocas en las que estaba más descontrolado, por lo que hubo que incrementar el dispositivo de seguridad a su alrededor. El personal de la Guardia Real ha tenido que sacarlo de casas privadas en condiciones escandalosas. Si esta información fuera ampliada, al parecer, la Familia Real sería humillada. Es por eso que se tuvieron que eliminar vídeos donde Froilán podría dinamitar las bases de la Corona.
El compromiso de Juan Carlos I de reducir a Froilán en Abu Dabi ha tenido cierto efecto. Aunque se sabe que no está completamente reformado, pues sigue reuniéndose con sus amigos cuando visita España.