La reina Sofía está en Barcelona y visita El Nacional. La noticia habrá causado un pasmo a Juan Carlos, un susto a Felipe y un ataque de furia a Letizia. No les gusta la sección royal EN Blau de El Nacional. Que no se alarmen, todavía. La reina emérita está en Barcelona para una visita oficial a la Fundación Pasqual Maragall de lucha contra el Alzhéimer. Una enfermedad que sufre el expresident de Catalunya e Irene de Grecia, la hermana de la reina. La visita real ha merecido críticas de un sector de estudiantes de la Universidad Pompeu Fabra porque la sede de la Fundación está en el Campus Universitario de la Ciutadella donde se ubica la UPF.
Sofía ha bajado del coche oficial en los edificios de la calle Wellington, cerca del Parlament y del Zoo, y después ha ido a comer. Tenía que escoger un restaurante que le ofreciera comida vegetariana. La reina emérita no come animales. Así que según ha podido saber en exclusiva y con los propios ojos EN Blau, Sofía ha arrastrado a su séquito en un restaurante muy céntrico de Barcelona, en pleno paseo de Gracia. Con la feliz coincidencia que en la mesa de al lado comía un destacado periodista de EN Blau. Así nace la exclusiva de El Nacional: la reina Sofía comiendo una ensalada en el restaurante El Nacional.
Sofía ha escogido este local del Eixample, Pº de Gracia 24, entre Gran Vía y Diputación, subiendo a mano derecha, en la misma acera del Mandarin o de La Pedrera. Se sitúa al final de un pasaje estrecho. Es un conocido local que ocupa un antiguo parking de coches en un interior de manzana. Destaca por su decoración, por su tamaño y por tener diferentes espacios para comer. Sofía podía escoger entre La Braseria de carnes, La Taperia de tapas, La parada que es como un bar por comida rápida y La Llotja de pescado. Siendo vegetariana ha escogido La Llotja y sus inconfundibles sofás de piel de color morado. Según ha podido comprobar EN Blau, Sofía iba acompañada de un séquito de seis personas, cuatro mujeres y dos hombres, algunos de los cuales eran evidentemente escoltas. El menú que ha escogido no ha sido de pescado ni marisco sino una cosa más frugal: una ensalada, regada eso sí de vino blanco y de vino tinto. De postre Sofía ha tomado coulant de chocolate con fresas y un café solo, en taza pequeña. Para los que dudan si los reyes pagan cuando van a un restaurante EN Blau puede avanzar que sí que pagan. Ha sido un escolta que se sentaba en la mesa del lado de Sofía que ha pagado la cuenta con tarjeta. Obviamente paga Zarzuela con dinero público.
EN Blau también ha podido saber que era la primera visita de Sofía al local y que ha merecido la visita a su mesa de un responsable del restaurante. El gerente se ha despedido de la reina emérita con un cortés "Un placer haberla conocido". La reina Sofía se ha perdido por pocas horas el gran acto oficial de encendido del alumbrado de Navidad en la ciudad, que se ha hecho el mismo jueves 28 de noviembre en las 6 de la tarde en el mismo paseo de Gracia un poco más abajo, entre Gran Vía y ronda de Sant Pere. Sofía podría haber aprovechado para hacer unas compras navideñas ahora que se sabe que es partidaria de regalos baratos y pongos. Pilar Eyre reveló que Sofía obsequió a Letizia por Navidad con un pijama de franela de abuela y un pack de cremas baratas de The Body Shop.
Sofía ha estado acertada saliendo de la agenda oficial de Zarzuela, visitando un centro de referencia mundial como la FPM y poniendo la cara a una causa que le toca de cerca, el Alzhéimer. Y también acierta escogiendo para comer un local a la vista de todo el mundo y no un reservado VIP de la zona alta de Barcelona. La emérita tiene mejor imagen que los otros adultos de Casa Real. Y frugal: ensalada y coulant. En Blau la ha saludado con un 'Hola'. Ha sonreído.