Primera entrevista al marido de la reina Letizia. Pero no es al rey. Su majestad no concede entrevistas. El otro marido, Alonso Guerrero, responde a un periodista de El Mundo desde el mítico Café Gijón de Madrid, donde hacen tertulia a los escritores atormentados. La contraportada del libro que promociona tiene un mejor título que este El amor de Penny Robinson: "La historia de una persona que se convierte en personaje". La entradilla de la entrevista ya nos advierte que la conversación no será agresiva: "No tiene unas manos como las del soberbio profesor de literatura que es, más bien como el labrador que fue su padre". Y empieza con un desmentido después de muchos años de confusión: Letiza no es la alumna que se enamoró de su profesor: "A Letizia nunca la tuve en clase. La conocí en el instituto donde trabajaba". Era alumna pero no su alumna. La conoció en 1989, siendo Letizia menor de edad, entre los 16 y los 17 años.
Del álbum de fotos de la pareja no se ha conseguido el ejemplar más buscado: la imagen de la boda civil de la reina Letizia. 90 invitados han sido tentados con centenares de miles de euros por la foto: "Circulaba tanto dinero por esas imágenes. Pero yo sabía que no se iban a vender y no se han vendido. A mí me ofrecieron 300.000 euros por una foto". Esta locura hace que el periodista le pregunte si se refugió en las drogas: "Mí única droga es la lucidez. Ni he pensado en suicidarme". Compensa este pesimismo de autor maldito con una definición de felicidad que incluye a la reina Letizia: " La felicidad me la han dado las mujeres y la literatura".
La pregunta clave: 10 años de pareja y después de uno y pico de matrimonio, el divorcio. ¿Quién lo pidió y por qué? "No puedo contestar". ¿No puede? si no quiere es una cosa pero si no puede es que ha firmado algún impedimento. Tendremos que leer entre líneas: : "Las mujeres de mi vida me criticaron por mirar el mundo desde un andén. Las mujeres tienen celos de eso. El escritor siempre vive esperando que llegue algo". Es decir, Letizia le dejó por cansarse de un escritor que vive de manera "frugal" a quien la literatura aporta tanta felicidad como las mujeres. Letizia puede competir con la Corona pero no con un literato. Alonso Guerrero no se ha vuelto a casar. Y cortó con su otra expareja hace 6 años.
La foto bomba no es la de Letizia casándose por el civil sino la de la reina desnuda. El libro deja caer que estas fotos existen. El personaje de Laura (con L de Letizia) parece "la gran traidora que después del divorcio es capaz de todo" según los que ya han leído la novela. Al autor lo rebate "Ninguna mujer me ha traicionado". De esa Laura el libro dice que hay dos fotos desnuda. Guerrero insinúa que sí: "No lo hice cono esa intención. El lector debe leer entre líneas". Si una foto vestida de Letícia vale 300 mil, ¿cuánto vale una desnuda? España no está preparada. Lo más cerca que hemos visto a Letizia de una playa es esto:
La novela habla de una Letizia guapísima. Ahora que las operaciones la han cambiado su ex lo comenta: "La belleza a veces es peligrosa. Le dejo toda la libertad a la gente que opine (sobre les operaciosn d'estètica) Yo no opino nada Solo lo presencio". Sobre la ambición de Letiza "Nunca me habló de ser reina". ¿Y ahora que lo es, se siguen viendo? "Mí relación con ella y con el rey es absolutamente normal. Hemos contactado. Me han invitado a actos en la Zarzuela". Letizia se comportó bien con él, ahora como reina y antes de prometerse con Felipe VI: "Me llamó. Pero no me dijo lo que iba a pasar. Me advertía de las posibles molestias que yo podría padecer". La típica llamada a un ex: que me vuelvo a casar, con el jefe del Estado. De Felipe VI dice que es "Una buena persona".
El Mundo es respetuoso y coloca este titular "No soy monárquico. Pero creo que estoy en un país que se roba tanto que jamás podrá existir una república". Alonso Guerrero advierte al periodista que este es el titular. En Blau considera que unas fotos de Letizia desnuda guardadas en algún cajón harían que España entrara en shock.