Como bien saben todos aquellos que siguen habitualmente las noticias relacionadas con la casa real española, nada tiene que ver la vida que lleva actualmente Iñaki Urdangarin con la que llevaba hace unos cuantos años, cuando, siendo el marido de la infanta Cristina y una de las figuras mejor valoradas dentro de la institución, gozaba de todos los privilegios propios de una figura de su posición.
Sin embargo, si bien es cierto que el acuerdo de separación con la infanta Cristina ha provocado que su tranquilidad económica sea más que notable en este sentido y que su actual relación con Ainhoa Armentia es una relación, cuentan, mucho más tranquila y beneficiosa para el ex jugador de balonmano, parece ser que Iñaki quiere aún un poco más.
Iñaki Urdangarin debe rebajar su posición
En este sentido, no es que sea precisamente ningún secreto que parece ser que tanto la infanta Cristina como sobre todo su padre, Juan Carlos I, habrían querido llegar a un acuerdo con Urdangarin dejándole muy claro que, dándole unas cantidades de dinero, debía seguir apostando por no revelar muchos secretos y muchas situaciones que vivió durante sus muchos años en la casa real.
Es más, hay quien dice que incluso Iñaki accedió a pasar en cierto tiempo en prisión para, una vez saliera, tener su vida económica más que solucionada. Sin embargo, parece ser que en los últimos tiempos Urdangarin no se siente del todo satisfecho con el acuerdo económico, y está presionando a la infanta Cristina para que mueva ficha y con ello pueda el aumentar su calidad de vida, algo que no ha sentado nada bien a sus hijos, sobre todo a los mayores.
Y es que tanto Juan como Pablo son muy conscientes de que, por mucho que de puertas hacia fuera la familia real sea una institución neutra en muchos sentidos, Iñaki no puede seguir presionando más a su madre, que no deja de ser la hermana del rey y que, por lo tanto, tiene contactos muy estrechos que podrían perjudicar mucho la vida de Urdangarin.
Veremos hasta qué punto Iñaki está dispuesto o no arriesgar su tranquilidad actual para mejorar su vida económica, pero estas presiones a la infanta Cristina, que ya ha accedido mucho en este sentido, pueden acabar pasándole factura.