Felipe VI tiene centenares de ahijados. Es una tradición monárquica que el rey acepte ser padrino de chicos y chicas de la aristocracia o ricos. Tiene una larga lista de ahijados. Solo dos de sus sobrinos tienen este "honor": Victoria Federica y Miguel Urdangarin. No sirve de mucho, no regalará monas ni ningún otro detalle. Hasta ahora. Este fin de semana se ha casado un joven asturiano a quien Felipe aceptó apadrinar cuando no había nacido, estaba dentro de la barriga de su madre, en una visita a Asturias hace 32 años. Felipe López (se llama así por su padrino real) se ha casado con Lorena Meana en Deva (Gijón) y el rey se ha presentado sin anunciarse a su boda.
El diario asturiano El Comercio ha publicado decenas de fotos del enlace con Felipe en medio de los invitados, sin Letizia (que nunca "trabaja" los fines de semana) y aparece como un pulpo dentro de un garaje. Fuera de lugar. Nadie sabía demasiado cómo tratarlo. Como no se trataba de una boda royal, los invitados se han dedicado a hacerle fotos y una ha destacado sobre el resto porque Zarzuela tiene prohibido, repetimos: prohibido, hacer fotos al rey mientras come. EN Blau da fe. En 7 años de mirar todas las imágenes del monarca, no hemos localizado ni una sola foto de Felipe VI ingiriendo alimento, como no la hay de la reina Letizia. Todas se remontan a cuando eran príncipes. Se ve que los reyes no comen. Pero un invitado muestra a Felipe alargando la mano para zamparse una croqueta:
Ha sido Pilar Eyre la que ha recordado que la prensa tenemos prohibido mostrar a los reyes bebiendo o comiendo. Recuerda aquella otra época, cuando Zarzuela se creía con suficiente poder para reñir a periodistas por explicar una cosa tan poco trascendental como que Juan Carlos bebe güisqui. Eyre lo explicó y la riñeron. Ahora de Juan Carlos se puede explicar todo pero sigue habiendo un férreo control de qué se publica de Felipe y Letizia. Algunos medios lo publicamos todo, tanto los negocios turbios de Felipe y Letizia como Felipe comiendo croquetas, cosa que nadie osa publicar no sea que Casa Real se enfade.
En el diario dicen que Felipe se marchó antes del banquete: "El Rey se quedó solo a los pinchos. Tomó sidra y departió animadamente con los novios, su familia y los invitados". Sidra y lo que no es sidra. En la foto se ve como bebe cerveza, y toma el aperitivo, lo que ellos nombran matones. Un rey con hambre y con prisa, se marchó el sábado por la tarde a Zarzuela. Tenía que cenar.
Otra ahijada que se hizo famosa
La otra hijuela famosa del rey fue Martina Jaúdenes, una rubia espectacular que mientras Felipe iba en barco se hizo tapar los pechos en alta mar para saludarla en una foto icónica que publicó en primicia EN Blau:
El encuentro marinero del rey Felipe y su tripulación del Aifos con una misteriosa chica rubia en un reducido bikini blanco en el puerto de Palma creó cierta confusión. La joven, que según se podía apreciar en las fotografías de los paparazzis tapaba con cierto rubor su cuerpo con una toalla, era su hijuela: Martina Jaúdenes. Hija de un amigo piloto y armador de embarcaciones del monarca, Eugenio Jáudenes. No solo llamó la atención de Borbón y de sus grumetes, sino que también la de la opinión pública. Su Instagram es público y ofrece un retrato ajustado de la vida de Martina, que sigue la estela de 'bon vivant' del padrino.
Los ahijados sin derecho a mona. Felipe, el padrino tacaño.