Felipe es príncipe y no rey. El duque de Edimburgo ha vivido toda su larguísima vida cuatro pasos por atrás de la más real de las reinas mundiales, Isabel II. Sin ser rey, se ha dedicado a ponerle los cuernos a la reina y a ser huraño. Esta crisis del coronavirus el matrimonio ha huido de Londres y, refugiados en el castillo de Windsor lejos de Buckingham, han esquivado el contagio y la muerte. La reina a los 94 años está estupenda y el duque, que este miércoles 10 de junio cumple 99 años, reaparece con esta cara. Parece el padre y no el marido de la rejuvenecida Isabel:

En la cuenta oficial de Instagram de la Família Real inglesa (la española todavía sigue en el s.XX y no tiene) se indica que la foto está tomada "la semana pasada". Un día que el duque se encontraba de humor para salir al sol y no desintegrarse. A la reina no le hace falta ni sonreír para tener un ademán royal. Felipe parece lo que es, un abuelo endomingado que parece que cuando se quite la chaqueta pesará 40 kilos. De joven era guapo:

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Lo han celebrado con una recopilación de fotos antiguas. Con el príncipe Andrés inmerso en un caso de corrupción de menores, el caso Epstein. La Familia real británica tiende a llegar a centenarios, como la reina madre ya difunta. El primo lejano Juan Carlos no parece que durará tanto. Y tampoco está para celebraciones.