Felipe ya lleva muchos años felizmente casado (o no, quién sabe) con Letizia, después de otros tantos años siendo novios, desde que se enamoró perdidamente de ella cuando la veía dar las noticias, como en el vídeo reciente felicitando los 50 años de Informe semanal. La asturiana fue la mujer que finalmente escogió Zarzuela como futura reina ejemplar, y fruto de aquel encuentro, se convirtieron en rey y reina con dos hijas como la princesa Leonor y la infanta Sofía. Pero quién sabe si la historia hubiera sido bien diferente si el Borbón hubiera acabado con una de las anteriores parejas sentimentales o affaires que tuvo años atrás. Con las que tuvo alguna cosa... y con las que se quedó con las ganas, a pesar de que si hubiera llegado a buen puerto la cosa, quien sabe si quizás ahora estaríamos hablando de la versión española de Rainiero de Mónaco y Grace Kelly, un hombre de sangre azul y una rutilante actriz que hicieron enloquecer a los fans y la prensa rosa con su idílico enamoramiento.
La lista de amantes y aspirantes a reina con respecto a Felipe incluye nombres ya conocidos como los de Isabel Sartorius, Gigi Howard y, evidentemente, Eva Sannum y aquella mítica imagen dentro de una catedral que hizo poner a todo el mundo los ojos como platos el 25 de agosto del 2001, cuando se les vio a los dos en la boda del príncipe heredero de Noruega, Haakon, con Mette-Marit. Sannum, con un icónico vestido de color azul, era amiga de la novia. Y él, del príncipe noruego.
Lo que no es tan conocido es la obsesión que tenía el ahora rey español por otra mujer, también rubia, por quien se ve que bebía los vientos. Una actriz norteamericana que lo tenía absolutamente obnubilado: Gwyneth Paltrow. La intérprete, que tiene 50 años, cinco menos que Felipe, ha protagonizado algunas famosísimas películas: Seven, Shakespeare in love, El talento de Mr. Ripley, Amor ciego o Iron Man, y es uno de los rostros más famosos de Hollywood desde hace años. Con respecto a la vertiente personal, sonadísima fue su relación durante mucho tiempo con el cantante y líder del grupo Coldplay, Chris Martin, con quien tuvo dos hijos, Apple y Moses.
Paltrow ha estado de actualidad los últimos días a raíz del juicio en los Estados Unidos, que finalmente ha ganado, después del accidente de esquí que sufrió con un hombre que la acusaba de haber esquiado de manera imprudente y haber provocado un accidente que le dejó un fuerte golpe, cuatro costillas rotas y una lesión cerebral. Finalmente, sin embargo, la actriz ganó el juicio y fue considerada no culpable. Y acerca de esto, Informalia recuerda un dato que quizás muchos no saben, que tiene como coprotagonista a Felipe VI. Eran los inicios del año 2000, e incluso algunos medios extranjeros como el noruego Afterposten o el británico Daily Mirror aseguraron que Paltrow se había convertido en alguna cosa más que una amiga del heredero. Explican que Casa Real confirmó un encuentro en Mallorca entre el Borbón y la actriz, aunque en teoría, también habrían estado Martin (que todavía no había tenido nada con Paltrow), las hermanas de Felipe, Cristina y Elena, Jaime de Marichalar y Rosario Nadal.
Pero los rumores nunca desaparecieron del todo, e incluso, el citado medio recuerda que en el año 2017, un autor francés, Jean Chalvidant, volvió a poner su nombre encima de la mesa en el libro Felipe VI de España, el rey normal. El escritor insiste en que la actriz "nunca cayó rendida a los encantos del entonces heredero". Y una amiga íntima de Paltrow reveló a la revista Vanity Fair que "Gwyneth es una chica muy lista con la cabeza muy bien puesta. Le gustaba Felipe, sí, pero cuando vio la que le podía caer encima, no lo dudó ni un momento. Salió por patas, como se suele decir". ¿Se imaginan a Gwyneth Paltrow como reina en lugar de Letizia...?