Nueva visita de la Casa Real a la díscola Catalunya. La 70.ª edición de los Premios Planeta es un encuentro muy goloso para Felipe y Letizia: saben que se encontrarán con la "buena Cataluña". Sí, con 'ñ'. Una cena con la flor y la nata de la cultura, el empresariado, la política, los medios, la farándula, etcétera, todos ellos bienvenidos a la cita literaria. O al menos no tienen más remedio que cursarles la invitación. El Museu Nacional d'Art de Catalunya estaba lleno hasta los topes, y la gran mayoría tenían tres cosas en la cabeza: dejarse ver, aplaudir al ganador o ganadora y, evidentemente, rendir homenaje a la Corona, 'la que votamos entre todos'.
La alfombra roja (en este caso azul) del acontecimiento fue un no parar de rostros conocidísimos. Por ejemplo, una nutrida representación de Antena 3, la gran joya de José Crehueras: desde Susanna Griso a Mónica Carrillo o Manel Fuentes, con una sonrisa del Besòs al Llobregat. No se lo perdió Boris Izaguirre, que tiene el don de la ubicuidad: venía directamente de la fiesta muy de derechas de Mario Vargas Llosa. Tampoco Santi Vila, vete a saber el porqué. Sandra Barneda, finalista del año pasado, evidentemente, estaba, así como Marina Castaño, ex de Camilo José Cela, o el escritor Eduardo Mendoza. Un poco de todo, sí. A la que no vimos fue a Carmen Lomana. Quizás no era el día, después de lo que dijo de las piernas de la Infanta Sofía.
Hubo dos grandes ovaciones durante la gala. Una, la propia del objetivo de la noche: coronar a un ganador del cheque de un millón de euros, y que fue a parar a una firma misteriosa: Carmen Mola. ¿Una mujer? No. Tres hombres: Jorge Díaz, Agustín Martínez y Antonio Mercero, seis manos para escribir la trilogía "La novia gitana". En esta participaron todos los asistentes. La segunda, la mencionada a Felipe y Letizia. Fue más sonora que la primera, aunque carecía de los decibelios de las manos de tres invitados. Dos estaban en la mesa presidencial, con Crehueras y su mujer Columna Martí, los monarcas, la delegada del Gobierno Teresa Cunillera, el ministro de Cultura Miquel Iceta, la consellera de Cultura Natàlia Garriga o la alcaldesa Ada Colau. Muy cerca, en una mesa anexa, estaba Joan Laporta, invitado como presidente del F.C.Barcelona. Todo salen en la imagen del fotógrafo de El Nacional.cat Sergi Alcàzar.
Ya se pueden imaginar quiénes son los tres que se mantuvieron en silencio durante el acto de homenaje a a los reyes. Ni Garriga, ni Colau, ni Laporta. Sin embargo 'El Preparao' y la consorte no se dieron cuenta ni apuntaron la falta, porque para compensarlo (con creces) tenían a Miquel Iceta, un verdadero fan en presencia de los 'royals'. Se rompió las manos, literalmente. Las pasó canutas para coger el tenedor y el cuchillo durante la cena de tanto daño que le hacían. Lo daba todo, como se ve en la foto. El Borbón, de hecho, se partía de risa. Letizia ni lo miraba.
Una vez acabada la gala, todo el mundo para casa, que se hacía tarde. Felipe y Letizia, a Madrid, claro. No fuera que se contagiaran del virus separatista que flotaba fuera del recinto ocupado para la ocasión. Hasta más ver..