La Casa Real empieza el año con múltiples celebraciones. Y no estamos hablando de la llegada de los Reyes Magos de Oriente. El rey emérito cumplía 86 años desde de Abu Dabi, donde reunió a amigos, compañeros y gran parte de la familia al puro estilo de Marbella. Justo un día después, Felipe, Letizia y Leonor asistían a la primera celebración del año, la Pascua Militar. Una ceremonia de homenaje a las Fuerzas Armadas y al cuerpo de la Guardia Civil, donde, sin ningún tipo de duda, no se percibe un buen inicio de año entre el matrimonio. Tristeza y frialdad, son las dos palabras que definirían la primera aparición de los Reyes del año. El peso del acto caía sobre los hombros de la princesa de Asturias, mientras en el rostro de sus padres se refleja una crisis matrimonial. Un Felipe gélido, frío y sin complicidad, y una Letizia delgada, más descuidada y con los ojos llenos de lágrimas.
La llegada de Letizia en la plaza de la Almudena del Palacio Real ya ha dado para hablar. Con un aspecto desenfadado, más delgada y con una mirada triste. La reina lucía uno recogido informal, con una cuotidiana cola en el pelo y una capa que ya había utilizado más de una vez en algún otro acto. Bajo la capa de piel sintética, una blusa gris y sin ni una joya por complementar el conjunto. Apagada, olvidada e incluso envejecida. Una cara delgada, con los pómulos extremadamente marcados, símbolo de envejecimiento, dejadez y mucha tristeza. Durante el acto les hemos visto más distanciados que nunca, no ha habido ningún gesto de complicidad y, lo que más se destacaba durante la ceremonia es la distancia de la reina Leticia y el importante papel de la Princesa de Asturias, representando toda la poca elegancia y majestuosidad de la familia real actualmente. Pero el momento culminante para ver la tristeza de la reina Letizia ha sido durante la mención de Margarita Robles en el discurso a los reyes. Una muestra de apoyo, que la reina respondía con tristeza.
La hora de los discursos ha sido el momento más vulnerable para la reina Leticia. Margarita Robles daba un discurso de elogio a los miembros de las Fuerzas Armadas cuando, de forma inusual, ha querido dedicarle unas palabras a la reina."Y quiero también agradecer muy especialmente en su majestad la reina por su diaria entrega y voluntad de servicio" una frase que quiere mostrarle apoyo a la reina y al difícil momento personal que está viviendo. La respuesta de la Reina Leticia lo refleja todo. Arropa la mirada y ni siquiera es capaz de mostrar agradecimiento para el reconocimiento de la ministra. El rey Felipe miraba a otra banda, distanciado de las palabras, mientras ella se sostenía los ojos brillantes llenos de lágrimas. Después, en el turno el rey, Felipe ha hecho un reconocimiento para el cuerpo militar y acto seguido ha nombrado las múltiples celebraciones durante el 2024. Entre la larga lista, ni rastro de su 20.º aniversario de casados.
La crisis matrimonial de Felipe y Letizia está en auge en todos los medios, asimismo lo asegura a Pilar Eyre, quien desde esta última aparición cree firmamento que la relación entre los dos reyes actuales se tambalea más que nunca. La presencia de Jaime del Burgo en las redes sociales está siendo cada vez más polémica. Una serie de mensajes subliminales que muy seguro llegan y atormentan la reputación de la reina Letizia. El próximo acto de la reina será el martes día 9 de enero, donde asistirá de forma individual a un centro de reinserción de mujeres que ejercían la prostitución. Ayer no podía ocultar su angustia ni siquiera con el maquillaje, ni la ropa, ni el peinado. Letizia está cada vez más hundida en su posible divorcio.