Por ahora Felipe VI no tendría ninguna presunta hija ilegítima, o por lo menos reconocida, a pesar de la libertina vida de su padre, Juan Carlos I. El actual rey de España tiene muchos contactos y algunos incluso los considera “hermanos”. El marido de Letizia se encuentra en estos momentos en Barcelona y se desconoce que sucederá el próximo 1 de junio. Los monarcas, que precisamente ese día tienen la agenda totalmente liberada, han recibido la invitación para acudir a la boda del príncipe Hussein, primogénito de los Reyes Abdalá y Rania, con la arquitecta saudí Rajtwa Al Saif, hija del adinerado empresario Kahled Al Saif.
Pero no son los únicos invitados al enlace, también han recibido una invitación los eméritos. Juan Carlos y Sofía fueron grandes amigos de su fallecido padre. Las infantas Cristina y Elena también podrían acudir al evento del año. Se desconoce todavía quien será la persona que representen a la Casa Real española, ya que acudirá, por lo menos un representante de cada monarquía. El emérito siempre ha tenido muy buena relación con el padre del príncipe y es probable que acuda aunque vaya Felipe, él ya no representante parte de la corona en ningún acto institucional.
El príncipe Hussein ve a Felipe como un "hermano"
Siempre han llamado a Juan Carlos y a Felipe “hermanos”, el padre al emérito y el hijo al actual rey de España. Los dos acudieron al entierro del monarca en Amman. Falleció a causa de un cáncer linfático. Estaba muy ligado a España, era un país que le apasionaba.
La reina Sofía conectó con la cuarta esposa de Hussein. "La Reina Sofía ha sido para mí una verdadera hermana y amiga todos estos años" reconoció. La emérita invitó a toda la familia cuando murió Hussein a Marivent.
Es cierto que entre Felipe y el rey Abdalá no hay una estrecha relación como Juan Carlos y Hussein, pero ambas familiares reales mantienen el contacto cordial. Han mantenido encuentros frecuentes y el jordano considera al marido de Letizia como “mi hermano y amigo”. Es por ello que espera la asistencia del monarca, pero es muy probable que se tenga que ausentar para no coincidir con su padre. La reina no soportaría encontrarse públicamente con su suegro, que les sentasen en la misma mesa y que esas fotografías viesen la luz en la prensa internacional. Llevo años intentando alejar la imagen de la corona del emérito.